En una entrevista con Canal E, Flavio Buccino, integrante de la ONG Argentinos por la Educación, analizó la implementación del programa de subsidios educativos —conocido como “vouchers”— destinado a familias que envían a sus hijos a escuelas de gestión privada con alto porcentaje de subvención estatal. Según explicó, se trata de una medida que no alcanza a todo el sistema educativo, sino a un segmento específico del subsistema privado.
“Este programa no es un voucher en el sentido estricto. Es un subsidio que se otorga a familias con ingresos inferiores a 2.077.824 pesos mensuales y cuyos hijos asisten a escuelas con más del 75% de aporte estatal”, detalló.
Un beneficio limitado y polémico
Buccino remarcó que este año se sumó un nuevo requisito: las familias no deben adeudar cuotas escolares para acceder al subsidio, una condición que podría dejar afuera justamente a quienes más necesitan esta ayuda. El vocero aclaró que la exigencia fue impulsada por las propias escuelas y aceptada por la Secretaría de Educación.
“Es un requisito polémico, porque puede excluir a quienes más lo necesitan. Si una familia no puede pagar, tampoco podrá acceder al subsidio”, advirtió.
Además, cuestionó que el subsidio signifique una triple vía de financiamiento público para las escuelas privadas con aportes estatales: subsidios a la oferta (por vacantes), subsidios a la demanda (vouchers) y beneficios impositivos.
¿Se profundiza la desigualdad?
El representante de Argentinos por la Educación advirtió sobre el impacto que este tipo de políticas puede tener en la distribución de la matrícula y la equidad del sistema educativo. Si bien el subsidio puede aliviar la situación de algunas familias, podría acentuar las diferencias entre el sector público y el privado, donde los primeros no reciben ningún tipo de ayuda directa, pese a que también enfrentan costos como útiles, guardapolvos o transporte escolar.
“Las escuelas públicas no cuentan con estos beneficios. Enviar un chico a la escuela también representa un costo que las familias deben afrontar”, subrayó.
¿Habrá un sistema de vouchers más amplio?
Consultado sobre la posibilidad de que el Gobierno avance hacia un modelo generalizado de vouchers, como se mencionó durante la campaña presidencial, Buccino explicó que hay múltiples variantes en el mundo y que, por ahora, no hay definiciones claras por parte del Ejecutivo. Lo que hoy existe es un subsidio parcial a la matrícula —hasta el 50%— que varía según el nivel de aporte estatal de cada institución.
Por último, Buccino mencionó que futuros estudios de Argentinos por la Educación analizarán el efecto de este subsidio en la desigualdad educativa, comparando su impacto en la matrícula y la equidad del sistema.