El panorama fiscal para Argentina en 2025 se presenta complejo debido a la desaparición de dos fuentes clave de recaudación, el impuesto país y los fondos extraordinarios derivados del blanqueo de capitales. Es por eso que para analizar este tema en profundidad, este medio se puso en contacto con la tributarista, Elisabet Piacentini.
El blanqueo de capitales, que permitió recaudar sumas significativas en años anteriores, ha perdido fuerza y su impacto en las arcas públicas se reduce drásticamente. A esto se suma la eliminación del impuesto país, que representaba aproximadamente el 1% del PBI en recaudación. Elisabet Piacentini señaló que, “la última reforma tributaria también disminuyó las alícuotas de Bienes Personales y muchos contribuyentes ya realizaron pagos anticipados, dejando una menor base impositiva para 2025”.
Cuáles son los cambios que instauró el Gobierno para revertir la falta de recaudación
El Gobierno ha comenzado a implementar cambios que buscan cubrir el déficit. Entre ellos, el aumento del 21% en las cuotas de monotributo y mayores retenciones en los salarios debido al desajuste entre el mínimo no imponible y las paritarias. Según Piacentini, “ahora todo el recibo de sueldo paga impuesto a las ganancias, incluyendo conceptos que antes estaban exentos como premios, viáticos y guardias médicas”.
Además, se prevé una presión mayor sobre las empresas. Un proyecto legislativo recientemente ingresado limita la actualización por inflación de quebrantos acumulados en ejercicios anteriores. “Esto afecta a empresas que tuvieron pérdidas en años anteriores y ahora deben pagar sobre ganancias sin poder compensar esas pérdidas de manera adecuada”, explicó Piacentini.
ANSES: otro de los organismos afectados por la quita del impuesto país
El financiamiento del ANSES también se verá comprometido, ya que muchos de los ingresos eliminados, como el impuesto país, destinaban recursos directos a este organismo. “El ANSES tendrá menos fondos, lo que complica su capacidad para sostener los pagos jubilatorios y otros beneficios sociales”, advirtió la entrevistada.
La carga laboral sigue siendo un obstáculo para la generación de empleo formal. Piacentini enfatizó que, “ni las cargas sociales ni los impuestos al trabajo han recibido una reducción significativa, lo que dificulta la creación de puestos de trabajo en el sector privado”.
Otro factor de preocupación es la liberalización de las comisiones de las ART, que incrementará los costos laborales. Según la tributarista, “las ART enfrentan muchos juicios y no son rentables, pero liberar los topes de sus comisiones añade una carga más para las empresas”.
La postura del Gobierno en cuanto al sistema tributario
El entorno tributario en Argentina no muestra señales de alivio. Piacentini destacó que el Gobierno mantiene un sistema recaudatorio agresivo que incluye anticipos, percepciones y retenciones, obligando a los contribuyentes a pagar impuestos antes de generar ganancias reales.
“El discurso del Gobierno critica a provincias e intendencias por sus altas alícuotas de ingresos brutos y nuevas tasas, pero en el orden nacional no se está dando el ejemplo. Las cargas fiscales siguen aumentando y complican tanto a trabajadores como a empresas”, señaló la experta.
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