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Sequía

El agro enfrenta una campaña difícil por la falta de lluvias

La escasez de precipitaciones en la región central del país y las altas temperaturas ponen en riesgo la producción de maíz y soja.

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Maíz | Noticias Argentinas

La falta de lluvias y la persistencia de altas temperaturas en la región central de Argentina están alterando gravemente las previsiones de cosecha para 2025. La producción de maíz, que atraviesa su momento más crítico, sufrió una primera estimación que reduce en 4 millones de toneladas lo esperado.

Cómo influyó el efecto de "La Niña" en las cosechas

Para hablar sobre este tema, Canal E se comunicó con el ingeniero agrónomo Christian Russo, quien expresó que el tema de la niña sigue siendo relevante, ya que el fenómeno continúa afectando las condiciones climáticas. 

Según el entrevistado, este año, se ha observado un comportamiento muy diferente en comparación con años anteriores, especialmente en cuanto a las temperaturas oceánicas superficiales y las anomalías que se están midiendo, que están cambiando a un ritmo mucho más rápido de lo habitual. 

Actualmente, “estamos atravesando una ola de calor debido a un centro de alta presión que está impidiendo las lluvias” y si bien se espera que llegue la lluvia este fin de semana, “hoy la probabilidad en Rosario y toda la región central es extremadamente baja”. Y agregó: “Esta área es una de las más afectadas por la falta de agua, y no se prevé una cantidad significativa de lluvia”.

Qué sucede con el máiz y la soja

Con respecto al maíz, Russo explicó que en esta primera estimación, se calcula una reducción de 4 millones de toneladas respecto a lo que se esperaba inicialmente, situándose la producción en 48 millones de toneladas. “Aunque el año pasado hubo 15 días de calor en enero, el resto de los meses se pudo contar con algo de agua y ahora, lamentablemente, estamos perdiendo esa posibilidad”, siguió.

En continuidad con el tema, el entrevistado mencionó que, “ya se está hablando de una campaña marcada por la sequía, y los indicadores a corto plazo no son favorables”. Y remarcó que este panorama genera preocupación en el sector agropecuario, también afectando la soja. 

Para finalizar, Russo agregó: “Con estas condiciones, se descarta la posibilidad de un escenario normal, lo que preocupa aún más, dado que los precios internacionales están presionados y los costos de producción son altos”.