El consumo de los principales productos que se suelen consumir en las fiestas no mostró diferencia con lo que fue el 2024, sin embargo, no fue tan malo como se esperaba. También está la influencia de la cuestión impositiva según el municipio, lo cual influye en el precio final y puede determinar en una merma del consumo. En ese sentido, este medio se contactó con el vicepresidente de CADAM, Armando Eugenio Farina.
“El 2025 arrancó como terminó el 2024, es decir, el 2024 terminó con una caída aproximada de 14 puntos dependiendo en qué nivel del país se lo mida y tocamos piso por marzo, abril, mayo y después a partir del año pasado se fue recuperando mensualmente”, comentó Armando Eugenio Farina. “Las fiestas fueron unas fiestas no muy buenas pero no tan malas como se las esperaba”, agregó.
Fuerte caída en el consumo de símbolos básicos de las fiestas
Posteriormente, Farina planteó: “Las categorías estuvieron trabajando a full, las categorías de champagne y sidra han sufrido muchísimo la merma, la gente ha cambiado el símbolo de brindis en el fin de año, el símbolo de la copa de champagne está un poco ausente”. Luego, manifestó que, “el plato que se utilizaba después del postre, como almendras y pan dulce, también en muchos casos no se ha armado”.
“Las familias están conociendo nuevas marcas, probando nuevas marcas y en las mal llamadas segundas marcas se encuentran productos de calidad y en esos productos de calidad algunos se quedan con esas marcas”, sostuvo el entrevistado, que después completó: “Cuando hay estabilidad de precios tenemos tiempo a buscar, elegir y comparar precios, ver qué calidad conviene y dónde se consigue el mejor precio”.
La influencia de los impuestos en el precio final
Por otro lado, el vicepresidente de CADAM señaló: “De cada $1.000 que se consumen en el supermercado, $490 son impuestos”. A su vez, remarcó que, “en la nueva ley que se puso en marcha a partir del primero de enero, se habla de que los impuestos nacionales tienen que ser transcritos en el ticket de compra y desde la cámara estamos pidiendo que las provincias adhieran a esta nueva implementación”.
Sobre el final, Farina destacó que, “hay algo que tenemos que entender los argentinos y los consumidores, es mentira cuando nos dicen que las cosas las va a absorber un comerciante o un industrial, absolutamente todos los costos se trasladan a precio y todo lo termina pagando el consumidor”.