Según datos del INDEC, la inflación en Argentina, el mes pasado fue de 2,7%, marcando un hito en la desaceleración de los precios.
Cuáles son las expectativas de inflación para fin de año
Para hablar sobre este tema, y repasar los datos que provienen de la Fundación para el Desarrollo Global, Canal E se comunicó con Eduardo Coria Lahoz, su presidente, quien expresó que efectivamente, “la inflación en Argentina ha mostrado una tendencia a la baja en los últimos tiempos, pero el país aún se mantiene entre los diez con mayor inflación a nivel mundial”.
Según el entrevistado, para este año, se espera una inflación cercana al 118%, mientras que para los próximos 12 meses se estima una desaceleración hasta el 35%. “Esta reducción es factible solo si el gobierno sigue la política de no emitir pesos, ya que se está experimentando un reajuste en los precios relativos, y aún hay muchos precios que deben ajustarse más”, agregó.
Cuáles deberían ser las tendencias para que siga bajando
En ese sentido, Coria Lahoz sostuvo que el desafío radica en que, a pesar de la tendencia a la baja, la economía está comenzando a encontrar un "piso", por debajo del cual romper esta tendencia requerirá cambios estructurales significativos. Y remarcó que un ejemplo sería una reforma en la estructura impositiva, además de reducir regulaciones que hoy encarecen la producción en Argentina.
En ese sentido, el entrevistado mencionó que si se implementan estos ajustes estructurales, como en el caso del sistema impositivo y las regulaciones operativas, “es probable que la inflación pueda reducirse considerablemente”. Y agregó: “Sin embargo, el proceso de cambio no será inmediato”.
Al ser consultado sobre qué debe suceder para que la inflación baje a cifras mucho menores, el entrevistado aseguró que, “se necesita tiempo y la implementación de reformas que mejoren la competitividad del país”. Y continuó: “Estos cambios deben abarcar tanto aspectos fiscales como operativos para lograr que la economía sea más eficiente y sostenible a largo plazo”.
El consumidor frente a la inflación
Haciendo referencia a la perspectiva del consumidor, Coria Lahoz expresó que la situación es ambigua, porque si bien se observa una mejora en el poder adquisitivo cuando se consideran productos dolarizados, la realidad de los salarios en pesos presenta una caída significativa. Y agregó: “En febrero de este año, los salarios en pesos cayeron un 43% respecto a diciembre de 2001, y en septiembre esa caída se estabilizó en un 36%”.
Para finalizar, el entrevistado, dijo: “Esta situación implica que, aunque ciertos bienes, especialmente importados, se han abaratado, otros siguen siendo costosos, reflejando una recuperación parcial y desigual del poder de compra”.
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