Cuáles son los motivos por los que en julio se produjo “el primer déficit fiscal del año”
El mes pasado, el gobierno enfrentó un déficit fiscal financiero que ascendió a $600.957 millones.
En julio se produce una de las mayores demandas de pesos del año |
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Así como lo había anticipado el presidente Milei, regresó el déficit fiscal. Julio se caracterizó por una serie de ingresos y egresos que superó los $600. 957 millones.
Para hablar sobre este tema, Canal E se comunicó con la economista Natalia Motyl, quien explicó que julio “es un mes complicado desde el punto de vista de la recaudación fiscal”.
Qué sucede en julio con el dinero
Según la entrevistada, la liquidación de divisas del sector agroexportador disminuye debido a factores estacionales, lo que resulta en menos ingresos en dólares y menor recaudación. Además, “la recaudación por el impuesto PAIS, que representa alrededor del 6% del total, también disminuye en julio y agosto”, agregó.
En ese contexto, Motyl aseguró que esta situación se debe a que, “a la mayor demanda de pesos en estos meses, sumado al cumplimiento de obligaciones impositivas, reduce la demanda de dólares y, por ende, la recaudación”. Y mencionó que, en cuanto a los gastos, julio también es un mes de mayores erogaciones.
Los gastos públicos
Al respecto, la economista contó que no solo se deben afrontar vencimientos de títulos públicos, sino también pagos adicionales en el sector público, como aguinaldos y bonos.”A esto se suman los gastos en seguridad social, lo que agrava el desequilibrio entre ingresos y egresos, presionando hacia un déficit fiscal”, continuó.
Cuál es el balance de los primeros meses
Por otra parte, la entrevistada mencionó que, aunque el déficit podría rondar el 0,2% en julio, si se observa el balance de los primeros seis meses, “el panorama no es tan grave”. Y destacó que, de todas formas, “es importante tener en cuenta que Argentina debe renegociar con el Fondo Monetario Internacional, que exigirá un equilibrio fiscal sostenible”.
Al finalizar, Motyl dijo: "Aunque las políticas monetaria y fiscal contractivas actuales tendrán un impacto a largo plazo, sus efectos en los precios no se sentirán hasta el segundo semestre del próximo año”.
