Crisis universitaria: la Universidad de Buenos Aires declaró la emergencia salarial

Desde la Universidad de Buenos Aires declararon la emergencia salarial, un anuncio que acompaña lo que se había manifestado a principio de año como emergencia presupuestaria, debido a que las universidades públicas no iban a poder subsistir con el presupuesto atrasado que tenían. En este contexto, este medio se comunicó con el decano de la facultad de filosofía, Ricardo Manetti.

“Se declaró en la sesión del consejo superior la emergencia salarial, en la primera sesión que tuvimos este año, habíamos declarado en aquel momento la emergencia presupuestaria de la Universidad de Buenos Aires”, comentó Ricardo Manetti. “Las universidades nacionales no contaban con un presupuesto para el 2024 y se hacía bastante insostenible pensar que las facultades pudieran funcionar durante el primer cuatrimestre”, agregó.

Se exige una recomposición salarial ante una pérdida real del 40% del salario

Posteriormente, Manetti planteó: “Hay otra situación que es la declaración de la emergencia salarial de los trabajadores docentes y no docentes, en este caso de la Universidad de Buenos Aires pero lo mismo ocurre en el resto de las universidades nacionales”. Luego, manifestó que, “hay una pérdida real del 40% del salario en esta primera mitad del año, con lo cual, se pide al Gobierno que haya una recomposición salarial”.

Las universidades se mantienen en funcionamiento con el presupuesto de 2023

“Todavía muchas facultades no hemos recibido la ayuda para el sostenimiento del funcionamiento en lo que va de este año”, sostuvo el entrevistado, que después completó: “Trabajamos con el restante del presupuesto 2023 y vemos bastante difícil comenzar la segunda mitad del año si no se dan las condiciones salariales para los trabajadores”.

Por otro lado, el decano de la facultad de filosofía señaló: “Nunca se planteó ninguna instancia de negociación, en algún momento se planteó un aumento del 8% pero no salimos de esa realidad”. A su vez, remarcó que, “por eso es que estamos realmente con una pérdida y que afecta la vida cotidiana”.

“Ha ocurrido por primera vez que tenemos trabajadores que están bajo la línea de pobreza”, expresó Manetti. “Por ejemplo las categorías no docentes, la categoría más baja están cobrando menos que lo que correspondería para no estar bajo la línea de la pobreza, pero también eso ocurre en el caso de los docentes más jóvenes”, finalizó.