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Economía nacional

Baja de retenciones: cómo impactará la medida en los productores

La reciente baja de retenciones en granos plantea incertidumbre entre los productores, quienes deberán evaluar cómo aprovechar los beneficios fiscales en un contexto de precios fluctuantes y políticas inciertas.

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Soja | Cedoc

La reducción de retenciones en trigo, maíz y soja podría generar un impacto directo en los productores, quienes ahora enfrentan decisiones clave sobre cuándo y cómo comercializar sus cosechas ante la incertidumbre sobre el futuro de la medida.

Qué factores deben observar los exportadores

Para hablar sobre este tema, Canal E se comunicó con Mónica Ortolani, fundadora de Tónica Online y docente en agroeducación, quien explicó que es importante observar qué exportador tendrá la capacidad financiera para aprovechar la baja de retenciones y comprar los granos para luego exportarlos.

Según la entrevistada, las retenciones pasaron del 12% al 9,5% en trigo y maíz, y del 33% al 26% en soja y esta medida estará vigente hasta el 30 de junio, “lo que genera incertidumbre sobre lo que sucederá después de esa fecha”.Y agregó: “Esto plantea dudas para los productores, quienes, al tener que tomar decisiones comerciales, se enfrentan a la incertidumbre sobre si deben o no aprovechar esta oportunidad de venta”.

En continuidad con el tema, Ortolani sostuvo que los productores que normalmente cubrían sus futuros de soja podrían estar ahora menos inclinados a hacerlo, ya que no saben si las bajas de retenciones seguirán después de junio o si incluso podrían desaparecer. “Aún más relevante en un año electoral, si se decide continuar con los beneficios o incluso profundizarlos, los productores podrían intentar aprovechar esta situación para obtener mejores precios”, siguió.

Qué sucede con los precios de los granos y el reflejo en los precios de los alimentos

En cuanto a los precios, la entrevistada contó que la soja aumentó un 8%, el girasol un 22%, el maíz un 38% y el trigo un 11% en el último año y “si comparáramos estos aumentos con la inflación en la economía, que alcanzó los 118 puntos, podemos ver que los granos aumentaron a un ritmo mucho más lento que los alimentos en general, que crecieron de 4 a 9 veces más rápido que los granos”.

Para Ortolani, este panorama sugiere que, aunque los granos aumentaron de precio, “el impacto de la baja de retenciones no necesariamente se refleja en una disminución de los precios de los alimentos”. Y siguió: “Es clave entender que los exportadores son los que deben anticipar el dinero y liquidar las divisas, no los productores”.

Al finalizar, la entrevistada agregó: “Actualmente, el productor se enfrenta a una situación donde la soja tiene un precio que varía dependiendo de cuándo se pague y esta variabilidad hace que los productores se encuentren con decisiones comerciales complejas, a la espera de más claridad sobre las políticas fiscales y los precios”.