"Las instituciones judiciales en Estados Unidos están yendo contra las corporaciones tecnológicas", apuntó Cecilia Degl’Innocenti en la rueda informativa del programa "Desde el canil". La periodista puso de relieve la importancia que tienen en la actualidad las denuncias que impulsa la Comisión Federal de Comercio estadounidense contra compañías como Alphabet, —cuya principal controlada es Google— y Meta, —propietaria de WhatsApp, Facebook e Instagram, entre otras—.
Sucede que durante la semana pasada se inició un juicio contra Mark Zuckerberg, CEO de Meta, acusado de incurrir en prácticas antimonopólicas al momento de adquirir la red social Instagram y la aplicación de mensajería instantánea WhatsApp. Las operaciones habrían perseguido "neutralizar amenazas y fortalecer su monopolio", protegiendo así a Facebook.
Degl’Innocenti subrayó la importancia del asunto al considerar que las redes sociales constituyen en la actualidad el canal de comunicación dominante por donde circula el discurso público, característica en la que se apalancan destacados jefes de Estado como Donald Trump para comunicarse directamente con la ciudadanía por fuera de los medios masivos de comunicación. En esa línea, lo concerniente a la propiedad de las redes sociales compone una dimensión política y estratégica, además de comercial.
Degl’Innocenti advirtió que el futuro de Meta podría estar en riesgo. El caso forma parte de una ofensiva legal de mayor envergadura por parte del gobierno federal de Estados Unidos contra las grandes tecnológicas. Recientemente, Google fue condenada por mantener acuerdos abusivos con medios gráficos mediante el control de la pauta publicitaria digital, lo que constituyó una maniobra para bloquear a la competencia y preservar su hegemonía.
La periodista observó que Zuckerberg eliminó la política de controles de verificación de información en sus redes sociales, acciones que limitaban la difusión de contenido falso y desinformación política, tan solo unos días antes de la asunción del segundo mandato de Donald Trump, en un intento de congraciarse con el republicano y evitar eventuales avances futuros contra la millonaria e influyente compañía de su propiedad.
El libro que revela los secretos del poder de Mark Zuckerberg
Además, Degl’Innocenti mencionó que el CEO de Meta adquirió una lujosa mansión en Washington D.C., lo que para muchos analistas representa un movimiento estratégico para influir desde cerca en el poder político y judicial del país.
Desde la administración Biden, el fiscal general Merrick Garland y la Comisión Federal de Comercio (FTC) vienen impulsando una agenda más estricta respecto de las big tech. Consideran que la concentración desmedida de poder en pocas plataformas digitales atenta contra la libre competencia, la privacidad de los usuarios y hasta la "salud" de la democracia.
Por su parte, Zuckerberg niega todas las acusaciones y afirma que las operaciones de Meta cumplen con las leyes de competencia. Sin embargo, el proceso judicial podría obligar a la compañía a desprenderse de algunas de sus plataformas o a modificar sustancialmente sus algoritmos de distribución de contenido.
BR / FPT