El presidente electo Donald Trump amenazó a la Unión Europea con aranceles si sus países miembro no compran más petróleo y gas estadounidenses.
“Le dije a la Unión Europea que deben compensar su tremendo déficit con Estados Unidos mediante la compra a gran escala de nuestro petróleo y gas. De lo contrario, habrá aranceles”, dijo en Truth Social.
Donald Trump y Elon Musk sabotean un plan para evitar el "cierre" del gobierno de EE.UU.
La amenaza de Trump a la Unión Europea
Estados Unidos es el mayor productor de crudo y el mayor exportador de gas natural licuado del mundo. Los compradores de GNL —incluidos la UE y Vietnam— ya han hablado de comprar más combustible a EE.UU., en parte para disuadir la amenaza de los aranceles.
Los funcionarios y los Estados miembro de la UE se han estado preparando para una ofensiva comercial desde la victoria electoral de Trump el mes pasado.
La llegada de Trump a la Casa Blanca en 2017 sorprendió al bloque con la guardia baja. Trump, arguyendo a preocupaciones de seguridad nacional, en su anterior mandato impuso aranceles al acero y al aluminio europeos. Desde entonces, la UE ha reinventado su doctrina comercial y ha ampliado su caja de herramientas, lo que le ha proporcionado un abanico de opciones para contrarrestar las prácticas coercitivas.
“Estamos bien preparados para la posibilidad de que las cosas cambien con una nueva administración estadounidense”, declaró la ministra alemana de Asuntos Exteriores, Annalena Baerbock, tras una reunión del Grupo de los Siete celebrada en Italia a finales de noviembre. “Si la nueva administración estadounidense persigue una política de ‘América primero’ en los sectores del clima o el comercio, entonces nuestra respuesta será ‘Europa unida’”.
Cómo se prepara la Unión Europea para la vuelta de Trump
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, planteó el mes pasado la idea de que las importaciones procedentes de EE.UU. podrían sustituir el consumo de GNL ruso del bloque.
El GNL “es uno de los temas que tocamos”, dijo von der Leyen tras una llamada telefónica con Trump. “Todavía recibimos mucho GNL a través de Rusia, de Rusia. Y por qué no sustituirlo por GNL estadounidense, que es más barato y reduce nuestros precios energéticos”.
EE.UU. ya es el mayor proveedor de GNL de Europa, pero las importaciones procedentes de Rusia se mantienen sólidamente en el segundo puesto. Los funcionarios de la UE están buscando formas de frenar el papel de Moscú mientras continúa la guerra en Ucrania, aunque el gas de gasoducto y el GNL rusos quedan en gran medida fuera del alcance de las sanciones. El bloque estudiará posibles medidas cuando debata un nuevo paquete de sanciones el mes que viene, pero sigue siendo difícil imponer fuertes restricciones, según una persona familiarizada con el asunto, que habló bajo condición de anonimato.
Pero la UE sigue preparándose para la posibilidad de acabar en una guerra comercial con Washington. El nuevo instrumento anticoerción de la UE fortalece las defensas comerciales y permite a la comisión, brazo ejecutivo del bloque, imponer aranceles u otras medidas punitivas en respuesta a tales restricciones políticamente motivadas.
La UE también adoptó el llamado reglamento de subvenciones extranjeras, que permite a la comisión impedir que las empresas extranjeras que reciban subvenciones estatales injustas participen en licitaciones públicas o en acuerdos de fusión y adquisición en el bloque, entre otras medidas.