Los precios al consumidor de Chile aumentaron menos de lo previsto el mes pasado, lo que proporcionó al banco central una buena noticia mientras que las autoridades dan señales de que volverán a recortar la tasa de interés la próxima semana.
Los precios subieron un 0,1% respecto de agosto, igualando la estimación más baja de una encuesta de Bloomberg entre analistas, cuya previsión mediana era de un aumento del 0,3%. La inflación anual descendió hasta el 4,1% en la serie encadenada, aunque se mantuvo por encima de la meta del 3%, según informó el martes el Instituto Nacional de Estadísticas.
Los banqueros centrales dirigidos por Rosanna Costa están sorteando una serie de alzas de las tarifas eléctricas mientras flexibilizan la política monetaria en una de las naciones más ricas de América Latina. El próximo aumento de la electricidad está previsto para octubre, lo que presionará el costo de la vida local hasta principios de 2025. Aun así, la demanda de los consumidores es desigual, mientras que sectores cruciales como el inmobiliario siguen débiles, lo que contribuye a enfriar la inflación.
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Los costos de los alimentos y las bebidas no alcohólicas cayeron un 0,5% durante el mes, mientras que las bebidas alcohólicas y el tabaco descendieron un 0,4%, y el transporte bajó un 0,3%, según el instituto de estadística. La ropa subió un 3,3% en el periodo.
Según las minutas de la última decisión de política monetaria publicada en septiembre, el banco central afirma que es probable que los costos de financiación desciendan del 5,5% actual hacia un nivel neutro, dados los menores riesgos para los precios al consumidor. Ese nivel se sitúa entre el 3,5% y el 4,5%, según las estimaciones de los banqueros centrales.
El ministro de Hacienda, Mario Marcel, ha afirmado que el abaratamiento de la gasolina y la reciente apreciación del peso atenuarán el impacto inflacionista del aumento de las tarifas eléctricas. Una moneda más fuerte ayuda a las perspectivas de los precios al mantener a raya los costos de importación.
Actividad económica y tasas de interes
Por otra parte, la actividad económica se contrajo un 0,2% en agosto por los descensos en los servicios y la industria, sorprendiendo a los analistas que habían previsto un tercer aumento mensual.
Economistas y operadores prevén que los banqueros centrales recortarán las tasas en un cuarto de punto el 17 de octubre y de nuevo en la última reunión de política monetaria del año, en diciembre.
Según las estimaciones publicadas el mes pasado, el banco central espera que la inflación anual se sitúe a finales de 2024 en el 4,5% y luego se suavice hasta el 3,6% en diciembre del año que viene, antes de alcanzar la meta a principios de 2026.
