La inflación anual de México se desaceleró ligeramente más de lo previsto a principios de enero, manteniendo en juego las posibilidades de un mayor recorte de las tasas de interés en la próxima reunión de política del banco central.
Los datos oficiales publicados el jueves mostraron que los precios al consumidor subieron un 3,69% en las dos primeras semanas de enero frente al año anterior, justo por debajo de la estimación mediana del 3,72% de los economistas encuestados por Bloomberg y por debajo de la lectura del 3,99% de finales de diciembre.
La inflación subyacente, que excluye elementos volátiles como los alimentos y los combustibles, se situó en el 3,72%, ligeramente por encima de la estimación mediana del 3,69%.
Política monetaria
Banxico, como se conoce al banco central, recortó el mes pasado su tasa de interés de referencia en un cuarto de punto por cuarta reunión consecutiva, hasta el 10%.
Los responsables de la política monetaria indicaron que en vista de los avances en materia de desinflación, en algunas reuniones podrían considerarse mayores ajustes a la baja, aunque manteniendo una postura restrictiva”.
El banco central, cuyo objetivo de inflación es del 3% más o menos un punto porcentual, celebra su próxima reunión de tasas el 6 de febrero.
Traducción editada por Paulina Steffens.