Elon Musk, el multimillonario que estará encargado de hacer que el gobierno de Estados Unidos sea más eficiente a partir de enero, puso la mirada en la Reserva Federal.
El banco central encargado de proteger a la mayor economía del mundo tiene “un exceso de personal absurdo”, escribió Musk en la plataforma de redes sociales X. Las observaciones formaron parte de un hilo que comenzó con otra persona que publicó sobre la última decisión política de la Reserva Federal. Musk, un prolífico comentarista en las redes sociales, no amplió el comentario.
Musk se ha convertido en uno de los asesores más cercanos de Trump mientras este se prepara para volver a la Casa Blanca, y está listo para dirigir una nueva agencia —llamada Departamento de Eficiencia Gubernamental— junto con el empresario Vivek Ramaswamy. El DOGE, como se le conoce a este nuevo departamento, pretende conseguir un gobierno más ágil y eficiente, con recortes del gasto por valor de US$2 billones.
La Junta de la Reserva Federal en Washington y sus 12 bancos de reserva regionales en todo EE.UU. emplearon a unas 24.000 personas el año pasado. Una cifra significativamente inferior a la de instituciones comparables. En el Eurosistema, que comprende el Banco Central Europeo y los 20 bancos centrales nacionales de la región, los bancos centrales de Alemania, Francia e Italia tenían en conjunto un mayor número de personas en nómina.
A diferencia de muchas áreas del gobierno federal, el banco central estadounidense no recibe financiación a través del proceso presupuestario del Congreso. Sus ingresos proceden de sus propias operaciones, principalmente de los intereses de los valores públicos que ha adquirido mediante operaciones de mercado abierto.
En tiempos normales, la Fed es una fuente de ingresos para el gobierno. Antes de sus rápidas alzas de tasas de interés en 2022 (que aumentaron los importes que la Fed paga por los depósitos y redujeron sus utilidad), enviaba aproximadamente 100.000 millones de dólares al año de ingresos excedentes al Tesoro.
Trump contra la Reserva Federal
En términos más generales, la Fed ha sido blanco del presidente electo Donald Trump en el pasado por su gestión de la política monetaria. Durante la campaña, argumentó que debería tener voz en la política monetaria y en la fijación de los tipos de interés. Recientemente, describió de forma mordaz el papel del presidente Jerome Powell como “el mejor trabajo en el gobierno”, diciendo: “se presenta en la oficina una vez al mes y dice: ‘veamos, lancemos una moneda’”.
Aunque Powell no ha respondido directamente, la presidenta del BCE, Christine Lagarde, rebatió la queja de Trump, invitándole a venir a observar el trabajo de su equipo en Fráncfort.
“Tengo miles de personas que trabajan duro -economistas, juristas, informáticos- y puedo asegurarle que trabajan mucho todos los días, no sólo una vez al mes”, dijo a Bloomberg TV. “Defendemos el euro, y luchamos por el euro, igual que la Fed defiende el dólar, estoy segura —no quiero hablar por Jay Powell— pero estoy segura de que así es como él ve su trabajo”.