La capital de Colombia, Bogotá, está endureciendo las restricciones al uso del agua después de que las precipitaciones más bajas en más de medio siglo impidieron la recuperación de los niveles bajos de los embalses.
A partir del 29 de septiembre, cada residente tendrá que pasar 24 horas sin agua corriente cada nueve días, según informó el viernes a la prensa el alcalde Carlos Fernando Galán. La administración también prohíbe el uso del agua del grifo para lavar autos y regar el césped.
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Bogotá endurece los controles de agua
Las autoridades iniciaron el racionamiento de agua hace cinco meses con la esperanza de que el sistema de agua de Chingaza alcanzara al menos el 70% de su capacidad total para octubre, cuando se prevé que alcance su punto máximo. Sin embargo, el clima seco ha durado más de lo previsto y el sistema se encuentra actualmente cerca del 45% de su capacidad.
“Las lluvias previstas evidentemente no han vuelto”, dijo Galán. “Necesitamos un esfuerzo adicional de los ciudadanos. Tenemos que volver a una tendencia de reducción del consumo de agua en Bogotá”.
Este año será el más seco de la historia en el sistema de Chingaza, añadió. Si el nivel del agua en el sistema baja hasta el 36%, se tomarán medidas más severas, dijo Galán.
En junio, el racionamiento se redujo a uno de cada 18 días sin agua, con la expectativa de que volviera a llover cuando terminara el clima seco causado por el fenómeno de El Niño. La ciudad también aumentó recientemente su capacidad para tratar el agua contaminada del río Bogotá para ayudar a satisfacer la demanda.
Se acerca la estación seca
El mes pasado se registraron las menores precipitaciones en 55 años, según la empresa de agua de Bogotá, lo que obstaculizó la recuperación que suele experimentar el embalse entre mayo y agosto. Con la llegada de la estación seca, la ministra de Medio Ambiente de Colombia, Susana Muhamad, había advertido que podrían ser necesarias más medidas para controlar la demanda de agua.
El clima seco también está afectando al mercado del gas natural. Dado que cerca de dos tercios de la capacidad instalada de Colombia proviene de la energía hidroeléctrica, su sistema eléctrico es vulnerable a las condiciones secas.
La empresa estatal de energía Ecopetrol SA dijo el viernes que está restringiendo la venta de gas para vehículos, ya que prioriza las centrales térmicas. La medida suspende las ventas a 13 empresas que tienen contratos sin seguro, según un comunicado.
