La economía de México registró un crecimiento tibio en el segundo trimestre, ya que casi dos años de costos de endeudamiento de dos dígitos han tenido un impacto en la demanda.
El producto interno bruto creció un 0,2% en el período abril-junio, igualando la lectura preliminar de un aumento del 0,2%, según datos finales publicados el jueves por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía de México. La cifra contrasta con la mediana del 0,2% de los economistas encuestados por Bloomberg y representa un aumento frente a la lectura revisada del primer trimestre de 0,1.
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En comparación con igual período del año anterior, el PIB se expandió un 2,1%, ligeramente por debajo del aumento del 2,2% de los datos preliminares y de la mediana del 2,2% de las estimaciones de los economistas.
México: la economía se desaceleró levemente
La economía mexicana empezó a desacelerarse en el último trimestre de 2023, tras haber superado las expectativas durante gran parte del año, y el impulso ha seguido perdiendo fuerza. Aunque el aumento del gasto público en el período previo a las elecciones nacionales de junio reforzó la demanda, las estrictas condiciones financieras y los vientos en contra a nivel mundial hacen prever a los economistas que la producción anual se desacelerará por tercer año consecutivo en 2024 y por cuarto en 2025.
En su última reunión, celebrada el 8 de agosto, el banco central de México analizó la evolución reciente de la segunda economía de América Latina y consideró que la pérdida de impulso ofrecía margen para bajar las tasas de interés por primera vez desde marzo. En una decisión dividida, Banxico —como se conoce a la institución— efectuó un recorte de un cuarto de punto, hasta el 10,75%, a pesar de revisar al alza algunas estimaciones de inflación.
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En una entrevista posterior con Bloomberg News, el subgobernador Omar Mejía dijo que la prolongada caída de la inflación subyacente y la reciente desaceleración económica fueron algunos de los factores que respaldaron la decisión del banco de recortar las tasas.
La desaceleración de la economía mexicana podría continuar, indicó Mejía, influida por la debilidad de la manufactura tanto en México como en Estados Unidos.
El mes pasado, Grupo Financiero Base revisó a la baja su pronóstico anual de crecimiento económico para 2024 a 1,3% desde una estimación previa de 1,6%, mientras que mantuvo su proyección para 2025 en 0,8%, según la jefa de investigación económica Gabriela Siller.
