Los funcionarios del Banco Central Europeo se están preparando para duras negociaciones sobre si reducir aún más las tasas de interés o mantenerlas cuando fijen los costos de los préstamos en abril, según personas familiarizadas con su forma de pensar.
Los responsables políticos de linea expansionista actualmente ven pocas razones para hacer una pausa, dijeron las personas, que pidieron no ser identificadas al hablar de conversaciones confidenciales. Sus colegas de tendencia más restrictiva, sin embargo, se inclinan por una pausa para estudiar los riesgos geopolíticos y las implicaciones de un enorme aumento del gasto en defensa europeo, dijeron las personas.
Con la inflación enfriándose hacia el 2%, ha habido escaso rechazo a los seis recortes de un cuarto de punto en las tasas de depósito del BCE que se han aplicado desde junio pasado. La presidenta de la autoridad monetaria, Christine Lagarde dijo que la última, la del jueves, no tuvo oposición. Solo el austriaco Robert Holzmann se abstuvo.
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Los banqueros centrales acogieron con satisfacción un acuerdo en la redacción de la declaración del BCE que describe la postura política como “cada vez menos restrictiva”, y ambos bandos lo consideran útil para transmitir sus opiniones sobre las tasas en las próximas semanas, según las fuentes.
Un portavoz del BCE se negó a hacer comentarios.
Lagarde se refirió repetidamente a la elevada incertidumbre dada la decisión del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de dejar de defender a Ucrania y Europa, lo que provocó una carrera armamentista. Esas inversiones, así como el riesgo continuo de los aranceles comerciales de EE.UU., hacen que predecir el crecimiento económico y la inflación sea más complicado.
Qué puede influir en la decisión sobre las tasas
“Si los datos indican que la postura de política monetaria más adecuada es un recorte, habrá un recorte”, dijo Lagarde a la prensa sobre el camino a seguir. “Si, por otro lado, los datos indican que la decisión más adecuada es no recortar, entonces habrá una pausa”.
Los mercados monetarios están igualmente indecisos. Los operadores actualmente descuentan 12 puntos básicos de flexibilización para el próximo mes, tras mostrarse más cautelosos ante la posibilidad de que los gastos militares de Europa aviven la expansión económica y la inflación.
“Esperamos mayores tasas de crecimiento en la zona del euro y una desaceleración en el proceso desinflacionario”, dijo Ulrike Kastens, economista senior de DWS. “Todo esto reducirá significativamente el margen para nuevos recortes de tasas de interés el próximo mes”.
Traducción editada por Paulina Steffens.