Una cautelar pide que la yaguareté Tania y su cría sean llevadas a un hábitat semicontrolado
La medida fue impulsada por el abogado Andrés Gil Domínguez, y tiene por finalidad promover el traslado de la yaguareté y su cría.
Luego de que se conociera el martes pasado la muerte de la elefanta Kiki en el Ecoparque, ayer se conoció la presentación de una medida cautelar a favor de la yaguareté Tania, y su cría, recientemente nacida.
La medida fue impulsada por el abogado Andrés Gil Domínguez, y tiene por finalidad promover el traslado de la yaguareté y su cría al Parque Nacional Iberá (Isla San Alonso) de la provincia de Corrientes o al Parque Nacional El Impenetrable de la provincia del Chaco a un hábitat semicontrolado a fin de garantizar “su máximo bienestar”.
Según se desprende de la cautelar, se pide que, tanto Tania como su cría, sean tuteladas en su “conducta silvestre”, y se evite, además, “un trato de acostumbramiento humano (denominado improntación humana), ya que podría afectar su “biografía en su hábitat natural”.
Por otra parte, intima al Gobierno porteño a que “presente en un plazo de 72 horas un informe con datos clínicos relevantes e índices de bienestar de Tania y su cría recién nacida y lo reitere cada treinta (30) días mientras tramite la presente causa”.
Gil Dominguez presentó la medida judicial representando a los felinos como animales no humanos, y la base de la acción judicial se fundamenta en el artículo 41 de la Constitución Nacional, que garantiza el derecho a un ambiente sano, y en normas internacionales de derechos humanos, invocando la necesidad de un hábitat adecuado para los animales salvajes como parte de sus derechos.
El abogado también pidió en su escrito que, una vez cumplido el periodo de desarrollo materno junto con Tania, su cría “sea liberado a efectos de ser reinsertado en su hábitat natural por conculcar la conducta del Gobierno porteño el derecho al hábitat natural de los animales silvestres, el derecho a la salud animal, y al derecho al bienestar animal de Tania y su cría”.
Consultados al respecto, desde el Ecoparque porteño, organismo que depende de la Subsecretaría de Ambiente comunal, señalaron que “tanto Tania como su cría se encuentran en buen estado general. La madre asiste al cachorro a diario. Todo se encuentra desarrollándose acorde a lo esperado”.
Respecto a la cautelar, en sí, PERFIL pido averiguar que recién la semana que viene la Procuraduría porteña responderá a los requerimientos del amparo, ya que ayer el Gobierno de las Ciudad fue notificado de la medida interpuesta. “No hay nada resuelto aún porque está el proceso abierto. Por lo pronto, Tanía y su cría van a seguir en el Ecoparque”, adelantaron desde el organismo porteño.
Tania es una yaguareté (panthera onca) nacida en el zoológico de Batán de la ciudad de Mar del Plata en 2011. Durante sus primeros años de vida, un tigre alojado cerca de su jaula la atacó provocándole la pérdida de su pata trasera derecha y heridas en la izquierda.
De todas maneras, este evento no impidió que el felino formara parte del Proyecto de Reintroducción del Yaguareté en los Esteros del Iberá, aunque su discapacidad le impedía ser liberada en ese hábitat silvestre. Tras vivir en los Esteros desde 2017, el pasado 26 de agosto fue trasladada al Ecoparque bajo la justificación que necesitaba cuidados especiales
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