Sicarios volvieron a la casa en la que mataron a una nena de 5 años y balearon a una menor de 10
Llegaron en moto y efectuaron varios disparos contra una propiedad de las calles Avalos y Larrechea, en la ciudad santafesina. La víctima no alcanzó a tirarse al piso cuando una de las balas le atravesó la remera.
En un barrio de la zona norte de la ciudad de Rosario, donde hace tres años una nena de 5 fue asesinada por sicarios y el año pasado un nene de 6 terminó herido de un disparo, una menor de 10 recibió ahora un balazo en el abdomen y no murió porque tuvo mucha suerte. Acá, los tiros suenan a diario.
El nuevo ataque ocurrió este miércoles 28 de octubre a las 19.30 en la misma esquina: Avalos y Larrechea. La víctima fue alcanzada por uno de los cinco disparos que efectuaron contra una casa de la cuadra. Según fuentes policiales, la nena sufrió el roce de uno de los proyectiles y fue derivada de urgencia al Hospital de Niños. Horas después, y tras ser curada y evaluada, recibió el alta médica. Un milagro.
La pequeña estaba con su mamá y su abuela en el interior de su casa cuando un grupo de desconocidos comenzó a disparar. Apenas sintió los balazos intentó tirarse al piso, pero una bala atravesó la remera. Se salvó por unos centímetros.
La casa de Avalos y Larrechea, donde en 2018 mataron a una nena y ayer balearon a otra niña (Foto: La Capital).
“La niña ingresó ayer a las 20:45 a la guardia del hospital acompañada por su mamá. Presentaba una lesión en el abdomen en el límite con el tórax por una excoriación lineal producto de una balacera ocurrida en su domicilio”, detalló la directora del Hospital de Niños Zona Norte, Mónica Jurado, en declaraciones a Rosario3. Jurado también resaltó que la niña se encuentra en buen estado de salud y que la situación no fue más grave “de milagro”.
Desde el Ministerio Público Fiscal, detallaron a PERFIL que "dos personas no identificadas pasaron en moto frente al domicilio realizando disparos". "No está claro aún hacia quien iba dirigido a la agresión. La Unidad de Flagrancia solicitó relevamiento del Gabinete Criminalístico, tomas de testimonios y tareas investigativas para identificar a los autores", ampliaron.
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Algo similar ocurrió el lunes 13 de enero del año pasado cuando un nene de 6 años, que estaba jugando en la misma cuadra donde este miércoles balearon a la nena de 10 años, recibió un disparo en una pierna al quedar en medio de una disputa entre bandas. Otro proyectil le rozó el rostro.
"La bala pegó en el marco de la puerta y le afectó de rebote un ojo y el tobillo", contó en su momento en padre del nene, quien directamente responsabilizó a los vendedores de droga: "En un momento hicimos las cosas mal, pero ahora estamos trabajando, no le debemos plata a nadie. Todos estos venden droga y no le dejan vivir a nadie".
Maite Ponce, de apenas cinco años, no pudo sobrevivir. El miércoles 4 de julio a la madrugada estaba durmiendo en el sillón del living de la misma casa de las calles Avalos y Larrechea, cuando sicarios comenzaron a disparar contra la propiedad. La nena recibió un disparo en la cabeza y murió prácticamente en el acto.
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