Para proteger a sus residentes

Florencia, otra ciudad agobiada por el turismo: qué prohibirá

La ciudad tomó medidas para aliviar la situación de los residentes ante la invasión de turistas.

Boom de turistas en Italia Foto: Agencia Freepik

Con el objetivo de mejorar la calidad de vida de los ciudadanos residentes, la ciudad turística italiana de Florencia tomó una serie de medidas que anunció en un plan de 10 puntos . El principal cambio consistió en prohibir el uso de lockers fuera de los alojamientos situados en el centro histórico de la ciudad, para controlar quién tiene realmente acceso al departamento. “Es un problema que venimos abordando desde hace mucho tiempo”, señalaron desde la alcaldía.

La ciudad, cuyo centro fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1982, recibió casi 9 millones de habitantes que pernoctaron en 2023 y a un millón y medio por un día. Hasta septiembre inclusive del año pasado había recibido 7,8 millones de pernoctaciones.

Pero no fueron solo los lockers. Florencia, de 367 mil habitantes, también prohibió los carritos de golf, los carritos de paseo junto a todos los “vehículos atípicos” con fines turísticos. Además, dejó de permitir los amplificadores y altavoces que utilizan los guías turísticos.

Otro objetivo es mejorar el intercambio de datos, la coordinación de políticas y la consulta a residentes y empresas locales en materia de turismo.

Se inauguró la pasarela para regular el "boom" de turistas en la Fontana di Trevi

Un dato relevante es que se concentra el 95% del turismo en 5 kilómetros cuadrados. La alcaldesa, Sara Funaro, expresó: “Queremos dar el mensaje de que nos preocupamos por la ciudad y queremos que sea atractiva, pero habitable para los residentes, cuya convivencia con los turistas se volvió más compleja desde la pandemia. Nuestro principal objetivo es garantizar que nuestra ciudad pueda mantener sus raíces, su naturaleza y su identidad".

 

La residente en Florencia y recepcionista de un hotel de tres estrellas, Giulia Giannatassio, describió que “hay tanta gente que es imposible disfrutar del centro, los visitantes parecen venir solo de fiesta y a emborracharse y los residentes no pueden dormir por la noche, se sienten inseguros y no salen de noche”.

LT