CONTRASTES

Las empantanadas negociaciones con el FMI enojan al mercado

El equipo económico celebra la baja de la inflación en junio pero no logra calmar las tensiones del mercado. Ayer el dólar marcó un nuevo récord cerrando a 522 pesos y las reservas netas del BCRA habrían cerrado la semana en un rojo cercano a los 7 mil millones de dólares. Fuentes de PERFIL en EE.UU. dicen que las discusiones se frenaron.

Juntos a la par. El equipo económico, en su última visita a al Fondo Monetario, en Washington. Foto: MECON

Mientras que el equipo económico celebra el 6% de inflación de junio (el único dato concreto de desaceleración desde enero de este año), el mercado y los principales jugadores económicos del sector privado se concentran en las trabas a la negociación con el FMI.

En el primer aniversario del ministro de Economía, Sergio Massa, al frente de la poltrona económica, el dólar blue trepó a un nuevo récord cerrando una semana fatal, con una cotización a $ 522 (ver página 4). Esto tendrá en lo sucesivo un derrame inevitable en los precios del mes en curso, que arrancó con ocho aumentos y que se juega el mantener o no la descaleración inflacionaria que arrojó el Indec para junio.

La lupa del mercado local y del Fondo Monetario se depositan hoy en la delicada situación de las reservas. Según el criterio del FMI, actualmente las reservas netas están en unos 7 mil millones, de acuerdo con cálculos de Ecolatina.

Ayer el BCRA informó que las reservas internacionales brutas terminaron en 26.032 millones de dólares. En casi tres semanas bajaron 5 mil millones, cuando el 25 de junio estuvieron a punto de perforar los 31 mil millones de dólares.

Las negociaciones con el FMI están empantanadas, incluso lo estarían los intercambios virtuales según fuentes muy cercanas a la mesa de discusión consultadas por PERFIL en los Estados Unidos.

Desde Economía se dejó trascender, en al menos cuatro ocasiones en el último mes, que una delegación técnica estaba a punto de subirse al avión con el viceministro Gabriel Rubinstein a la cabeza. Eso no solamente nunca ocurrió sino que, hasta anoche, no existía confirmación oficial de que esa misión fuera a volar hacia la sede central del FMI en breve.

Estiman que las reservas netas están en un rojo de US$ 7.000 millones

Fuentes del Ministerio de Economía señalaron que aún no existe el llamado formal del organismo internacional de crédito para formalizar ese encuentro.

Lo que el board del Fondo estaría en dificultades de avalar es una nueva ultraflexibilización para la Argentina. Haber conseguido la aprobación de los países que integran esa mesa chica de guiño político para ablandar las metas que ya negoció Massa apenas asumió fue un logro inusual y extraordinario que el FMI consideró porque no hay voluntad política de dejar caer en default al país.

Luego ocurrió que el equipo económico no logró mostrar cumplimiento de ninguna de esas nuevas metas “blandas”. Lo que de por sí ya será difícil de explicar técnicamente en los pasos protocolares que posee el FMI. Lo que además complica la situación es que el Gobierno está pidiendo desembolsos extraordinarios; es decir, no solo el dinero para cubrir los próximos vencimientos sino un plus, sobre el que se depositan las principales dudas internacionales en un año electoral y en el que los pagos concretados se efectuaron echando mano al swap con China, por primera vez en la historia.

Sergio Massa. Foto: NA

Las acciones en la bolsa porteña y las que cotizan en Wall Street cortaron ayer la racha alcista, pero registraron mayoría de subas en las últimas ruedas, mientras que los bonos en dólares operaron dispares, según las principales cotizaciones del mercado financiero.

En la mirada doméstica el dato del 6% redondo que difundió el Indec para la inflación de junio despertó una amplia gama de sensaciones.

En el seno del gabinete económico, euforia, festejo y un dato concreto de desaceleración inflacionaria para ofrecer desde enero 2023. Es justo el último que se difunde previamente a las PASO, ya que el del mes en curso se conocerá el martes posterior a las elecciones primarias.

Siempre en la arena nacional, las tensiones con el FMI pueden endulzar las tribunas más extremas de la coalición gobernante que aún tendría reservas sobre la candidatura de Massa. Por eso algunos analistas creen que Massa sobreactuaría la tensión con el organismo que preside Kristalina Georgieva para mostrarse luego como el articulador de la distensión.

Todo es posible en la arena política local aunque las versiones nacionales e internacionales sobre un mismo punto no coinciden y parecen el agua y el aceite.