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Larreta pide "no joder más con halcones y palomas"

El jefe de Gobierno porteño suma reuniones con figuras y se mide para 2023. Se mostró confiado en un acto con Vidal, Tetaz y Ferraro. El endurecimiento de su discurso y las reuniones secretas con Carrió y Duran Barba.

Construcción. Larreta pide unidad y cultiva el diálogo con referentes aliados. Foto: cedoc

Bronca contra los piquetes, pedidos para unificar energías contra el kirchnerismo y, como suele hacer, un raid de reuniones con distintos actores de Juntos por el Cambio. Horacio Rodríguez Larreta entró en la fase de construcción de su candidatura a presidente anclado con un discurso más duro y, acaso, más informal.

Ayer mismo en Almagro, junto a la agrupación juvenil La Generación, dejó una máxima: “No jodamos más con esa boludez de halcones y palomas, vamos a ganar la elección en 2023”. El jefe comunal viene pidiendo “unidad” y le había pedido a su gabinete no confrontar con Patricia Bullrich, quien había salido a criticarlo.

En el acto se presentó como candidato: “Tenemos que hacer los cambios para que un día nos reconozcan los libros de historia”. A su lado estaba María Eugenia Vidal, Maximiliano Ferraro (Coalición Cívica) y el radical Martín Tetaz, hoy ya metido de lleno en un futuro en el armado bonaerense.

El jefe comunal decidió la semana pasada que, con los piquetes, era momento de endurecer su discurso público. Como pocas veces se lo vio con bronca: siente que tanto la Justicia como el Gobierno son también responsables de un acampe que duró tres días y en el que había niños y casi 20 mil personas. Imposible de-salojarlos. Su endurecimiento fue festejado. Aunque no es su naturaleza, es probable que en otros temas se vea una actitud similar.

Por otro lado, hace poco más de una semana Larreta se reunió, en secreto, con Elisa Carrió. En la charla Lilita describió su visión sobre geopolítica. Estuvo viendo documentales sobre la invasión rusa a Ucrania y leyendo, en profundidad, sobre el tema. Incluso dio una charla en el Instituto Hannah Arendt.

Además hubo un reclamo sobre el rol de la CC. “Somos socios fundadores”, le planteó, para pedir un lugar más grande en la mesa de decisiones. También hablaron de la agenda de coyuntura: FMI y planes sociales.

Además, el futuro rol de Emilio Monzó como armador de JxC también se coló. Larreta tanteó cómo caería que lo sume orgánicamente. Carrió solía destrozarlo en público y en privado. Esta vez no estuvo tan tajante.

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Con todo, hoy el jefe comunal depositó la coordinación de su armado nacional entre el secretario del PRO, Eduardo Macchiavelli, el santillista Bruno Screnci (quien llegará al directorio del Banco Provincia) y Augusto Rodríguez Larreta, uno de sus dos hermanos, y quien ve con buenos ojos la llegada de Monzó. Diego Santilli aporta su visión semanalmente.

Paralelamente el lunes pasado en Uspallata, la sede del Gobierno porteño, Larreta, junto al secretario de Comunicación, Federico Di Benedetto, recibieron a Jaime Duran Barba y su socio, Santiago Nieto. Hacía más de dos años, antes de la pandemia, que no se veían.

Allí hablaron de la realidad política latinoamericana, algo que Duran Barba sigue de cerca, y cómo se dieron las últimas campañas: desde AMLO en México pasando por Guillermo Lasso en Ecuador y Gabriel Boric en Chile.

En lo doméstico, Duran Barba hizo hincapié en la importancia de la gestión y de “cumplir con las promesas” a las que se comprometió Larreta. Además, rescató la “cercanía” como otro valor fundamental. En especial, en un contexto de mucho “enojo” con la política.

En este marco, al interior de gabinete porteño los ministros comenzaron a entender por qué Jorge Macri (Gobierno) los suele incomodar: es parte de una estrategia de Larreta para sacudir la gestión. El jefe comunal suele bromear con él que tiene que movilizarlos cuando levanta su voz, generalmente disruptiva, con algún tema de coyuntura o pensando en la estrategia.

Todo lo contrario ocurre con la asesora Julia Pomares. La ex Cippec viene sumando desconfianzas. No todos concuerdan con su forma de trabajo. Un dato muestra la personalidad: no bien llegó a Uspallata lo primero que hizo fue pedir que le confeccionen tarjetas personalizadas como asesora de Larreta. También hay quienes empezaron a mirar cómo viene trabajando con una mesa de intelectuales que le pasan informes e ideas semanalmente. Poco de esto se comenta en el chat “Gabinete de Mujeres” que la tiene como una activa protagonista.