pronosticos para 2020

Un mundo en crisis espera al futuro presidente

Más allá de la crisis local, la región no pasa por su momento de mayor estabilidad para acompañar el nuevo gobierno argentino.

Incidentes y gases lacrimógenos en la marcha de Chile. Foto: AFP

Sea quien sea el próximo presidente de la Argentina a partir del resultado de hoy –o, en su defecto, tras un eventual ballottage en noviembre, si hubiera– no tendrá un mundo fácil que lo acompañe en 2020.

La vecindad, por caso, no es ningún remanso. Las protestas en Chile despertaron un reclamo profundo en el corazón de la sociedad chilena, que la ponen en directa confrontación con su dirigencia política y otros actores, como los propios medios, cuya conducta social se encuentra bajo revisión. En Bolivia, la incertidumbre en torno al triunfo de Evo Morales y Alvaro García Linera, oficializado por el Tribunal Supremo Electoral pero solo reconocido por tres países en el continente –Venezuela, Cuba y México– abre un signo de interrogación respecto a cuánto puede tensar la cuerda la oposición conservadora sobre la legitimidad del MAS para gobernar y lo que ello puede provocar.

Perú es otra duda, con su presidente, Manuel Vizcarra, cada vez más huérfano y sin una estrategia política que vaya más allá del corto plazo. De momento, están convocadas elecciones legislativas en enero para renovar congresales y es muy probable que ese resultado selle el destino del mandatario.

Mientras, en Venezuela, también Nicolás Maduro apuesta a un adelantamiento de las legislativas del año próximo con miras a conquistar el único poder que se le escapó de las manos. La oposición, de momento, no aceptó participar, lo que puede provocar un nuevo cimbronazo institucional.

El futuro del Mercosur dependerá, en gran medida, de cómo se recalibre el balance de fuerzas luego de la jornada de hoy, porque también Uruguay acude a las urnas sin un horizonte claro para el Frente Amplio. Hay en marcha un debate entre los socios para modernizar el bloque, plantear una rebaja del Arancel Externo Común y cambios en el mecanismo del consenso obligado. No obstante, el brasileño Jair Bolsonaro ya previno que podría motorizar algún tipo de quiebre si se resisten al aperturismo que impulsa su gobierno.

En el norte, Estados Unidos tiene por delante un 2020 de alto voltaje político. Primarias demócratas desde enero para definir al candidato a la presidencia entre perfiles muy antagónicos como el de Joe Biden, ex vice de Barack Obama –involucrado en las denuncias por los intereses económicos de su hijo, Hunter, con firmas en China y Ucrania–, y la senadora Elizabeth Warren, empujando al partido hacia su ala más radical. Del otro lado, un Donald Trump que ya arrancó su campaña bajo la misma bandera ultranacionalista que le dio la victoria en 2016, tanto en el comercio como en la inmigración.

Finalmente, China, socio prioritario de la Argentina, con una nueva rebaja en su expectativa de crecimiento para 2020, según el FMI, por debajo del 6% anual aunque con la mira puesta en las últimas decisiones de Pekín de relajar su histórica intervención en el mercado. Y Europa, pendiente de otra postergación del Brexit –ahora se habla del 31 de enero de 2020– y con la declarada intención de algunos miembros de la Unión Europea de revisar el acuerdo con el Mercosur antes de ratificarlo.