paros en aerolíneas argentinas

El Gobierno denunció penalmente por extorsión a Pablo Biró, secretario del gremio de pilotos

La presentación surgió luego de sus declaraciones a medios de prensa respecto a la decisión de utilizar su rol como Secretario General de APLA para perjudicar el transporte aéreo de pasajeros, advirtiendo por nuevos paros.

Pablo Biró, secretario general de APLA Foto: NA

El Ministerio de Seguridad de la Nación presentó una denuncia penal contra Pablo Biró, secretario General de la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA), por la presunta comisión de delitos de acción pública. La presentación ante el Juzgado Criminal y Correccional 12 a cargo de Elizabeth Paisán, secretaría 137 de Julio Herrera, surgió tras las declaraciones ante medios de prensa.

Lo acusan de utilizar su posición dominante como Secretario General de APLA para perjudicar el transporte aéreo de pasajeros, advirtiendo de “males futuros”, que profundizarían el perjuicio para la empresa estatal Aerolíneas Argentinas y para el público en general.

El texto de la denuncia cita una declaración del gremialista donde dice: “Esto se va a poner mucho peor...”. Los dichos de Biró se realizaron en el marco del conflicto aeronáutico relacionado con la decisión del Gobierno Nacional de declarar el transporte aéreo como un "servicio esencial", imponiendo la obligatoriedad de mantener un "servicio mínimo" en actividades de importancia estratégica para el país.

El Ministerio de Seguridad considera que las acciones y declaraciones de Pablo Biró podrían exceder el derecho de huelga amparado por la Constitución Nacional y constituir un acto ilícito bajo la figura del delito de amenazas extorsivas, contemplado en el artículo 149 bis del Código Penal.

La denuncia enfatiza que el derecho a huelga debe ejercerse de manera razonable y proporcional, y en el caso de servicios esenciales como el transporte aéreo, cualquier interrupción abrupta podría tener un impacto significativo para la gente y la seguridad pública.

La decisión de la cartera que conduce Bullrich argumenta que busca preservar la estabilidad de un servicio esencial y proteger los derechos de los ciudadanos. Cualquier medida de fuerza que afecte servicios públicos esenciales sin agotar otras vías previas podría ser considerada una "huelga salvaje" y, por lo tanto, estar fuera del amparo constitucional.

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Los dichos de Biró

El gremio aeronáutico viene realizando medidas de fuerza en demandas de recomposición salarial y el sábado pasado anticiparon mediante un comunicado que “el conflicto finaliza cuando se acuerde el monto de recomposición salarial, y todos/as los compañeros sancionados (apercibimientos, suspensiones, despidos) se encuentren en sus puestos laborales y se retrotraigan esas medidas disciplinarias”.

"Seguramente las medidas de acción gremial se irán incrementando en impacto y diversificando en su metodología. Estemos atentos. Nos necesitamos todos y cada uno. Sigamos así”, agregaban en el texto.

Ese mismo sábado, mientras se llevaba a cabo el paro de 24 horas de gremios aeronáuticos, tres pilotos de Aerolíneas Argentinas fueron despedidos por negarse a trasladar dos aviones Embraer 190 que debían ser devueltos a Lessor.

Pablo Biró, secretario general de la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA)

El secretario de Transporte, Franco Mogetta, adelantó que el Gobierno también "aplicará sanciones a todos los que no trabajaron, incumpliendo además con la nueva reglamentación dispuesta por el presidente Javier Milei, que declaró servicio esencial a la actividad aeronáutica".

"La escala irá desde descuento de haberes hasta despido", advirtió Mogetta, cuestionando "las pocas horas de vuelo" que tienen los pilotos de Aerolíneas Argentinas. "Estamos proponiendo desde el inicio discutir productividad, porque muchos de los pilotos no llegan a volar ni 40 horas mensuales cuando otras aerolíneas están en 90 horas mensuales. Cuando ellos comparan sus sueldos con otras aerolíneas tiene que ver con eso, conque vuelan menos".

El funcionario insistió en reclamar la expulsión del directorio de Aerolíneas al titular de APLA, Pablo Biró. "Vamos a avanzar con su exclusión del directorio de la compañía, porque la línea del presidente Milei es combatir las castas, la casta política, la casta sindicalista, y más casta que la de los pilotos creo que no hay, incluso reconocido por ellos mismos, que hasta defienden privilegios como los viajes en primera, o la cantidad de remises que tienen a disposición y los costos que eso le genera a la compañía", aseguró.

Tres pilotos de Aerolíneas Argentinas fueron despedidos por negarse a operar dos aviones que debían ser devueltos

Denuncia completa

FERNANDO OSCAR SOTO, abogado (T.30 F.934, CPACF), en representación del MINISTERIO DE SEGURIDAD DE LA NACION, constituyendo domicilio procesal en Av. Gelly y Obes 2289, CABA y domicilio electrónico bajo el CUIT 20-14927240-3 (Fernando.soto@minseg.gob.ar, 114-4463288), a V.S. me presento y digo:

I. OBJETO: En legal tiempo y forma, en mi carácter de Director Nacional de Normativa y Relaciones con los Poderes Judiciales y los Ministerios Públicos del Ministerio de Seguridad de la Nación, por mandato expreso de la sra. Ministra Dra. Patricia Bullrich, vengo a presentar denuncia penal contra el Secretario General de Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas, PABLO BIRÓ, por delitos de acción pública, en base a las siguientes consideraciones de hecho y aspectos de derecho:

II. HECHOS: El dirigente gremial PABLO BIRO, ha expresado a través de numerosos medios de prensa su decisión de utilizar su posición dominante como Secretario General de Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas, para perjudicar el transporte aéreo de pasajeros con advertencias de “males futuros”, que profundizarían el perjuicio para la empresa estatal Aerolíneas Argentinas y para el público en general.

Así, por ejemplo, el diario “El Cronista” en su edición digital del día de ayer, 16/9/2024 (https://www.cronista.com/economia-politica/la-fuerte-advertencia-de-pablo-biro-a-aerolineas-argentinas-esto-se-va-a-poner-mucho-peor/), cita sus expresiones: “La fuerte advertencia de Pablo Biró a Aerolíneas Argentinas: "Esto se va a poner mucho peor...", agregando luego “Cuando digo mucho peor no me refiero a los alcances de lo dañoso que puede ser una huelga. Lo que digo es que el Gobierno está jugando todas las cartas muy fuerte y nosotros no estamos dispuestos a vivir bajo una tiranía”. (Ver también: https://www.perfil.com/noticias/politica/pablo-biro-el-conflicto-ya-esta-grave-y-se-va-a-poner-mucho-peor.phtml y https://www.clarin.com/economia/pablo-biro-anticipo-iran-justicia-esencialidad-transporte-aerocomercial-conflicto-grave-va-poner-peor_0_O7XhVMun9k.html, entre otras publicaciones).

El denunciado profirió esos dichos en el marco en que el Gobierno declarara “servicio esencial” a la actividad aérea, disponiendo la obligación de un “servicio mínimo” en “aquellos que son de importancia trascendental para el país y/o en huelgas en sectores de alta importancia que por su duración o magnitud pueden producir daños irreversibles, poner en peligro la salud o la seguridad pública, o generar consecuencias graves para el país”.

Como todos los derechos, el derecho de huelga no es ilimitado, ya que solamente debe ser ejercido como último recurso, como medida extrema, después de haber agotado otras vías y medidas previas. A su vez, el efecto ostensiblemente dañoso de una huelga en un servicio o actividad esencial, como lo es el transporte aeronaval, tiene un efecto de alto impacto en la sociedad con un poder de daño muy alto, no solo para la empresa Aerolíneas Argentinas, sino también para la sociedad en general. Si bien la normativa del derecho común ampara los derechos individuales y los derechos de incidencia colectiva, la ley no ampara el ejercicio abusivo de los derechos individuales cuando pueda afectar los derechos de incidencia colectiva en general.

El abuso de derecho es aquel en el cual el titular lo ejerce en exceso de las facultades y atribuciones concedidas por la legislación, de modo que se afectan la buena fe, la proporcionalidad y razonabilidad de las prestaciones y, en particular, el objetivo ético y central del derecho articulado, para lograr un rédito irrazonable, desproporcionado, generando daños impredecibles y distorsivos. La situación ahora denunciada podría revelar la posibilidad de ser, más que una medida de presión sindical, una verosímil amenaza extorsiva, en virtud de que los daños que habría que soportar son muy graves comparados con el costo de las reivindicaciones reclamadas por el gremialista denunciado.

La huelga salvaje, es decir, la huelga que en forma abrupta y violenta afecta servicios públicos esenciales, puede transformar la medida de fuerza en un acto ilícito, que de ningún modo puede encontrarse respaldada por el derecho de huelga consagrado en la Constitución nacional y podría constituir la comisión de diversos tipos penales, como lo es el delito de amenazas extorsivas, previsto en el art. 149 bis del Código Penal de la Nación.

Considerando que las acciones puestas en Vuestro conocimiento constituyen, verosímilmente, la comisión de delitos de acción pública, es que formulo la presente denuncia a los efectos legales pertinentes".

 

RB / Gi