Una ley que impulsa la integración urbana de los barrios populares

La Legislatura porteña aprobó con 38 votos la adhesión a la Ley Nacional N° 27.453 y al Registro Nacional de Barrios Populares. Ya existen 49 en la ciudad y la mayoría están en la zona sur. Allí viven más de 80.600 familias. Por qué son importantes.

En el medio de la discusión sobre la modificación del Código Urbanístico, que no establece ningún avance sobre la urbanización ni sobre el derecho al acceso a la vivienda en la Ciudad de Buenos Aires, la Legislatura aprobó con 38 votos la Adhesión a la Ley Nacional N° 27.453 y al Registro Nacional de Barrios Populares, definiendo como Autoridad de Aplicación al Instituto de la Vivienda de la Ciudad de Buenos Aires. La importancia de construir consensos transversales para promover el bienestar de las mayorías.

En la ciudad hay 49 barrios populares, en los que viven más de 80.600 familias, la mayoría de los cuales se encuentran en el sur, principalmente en las comunas 8, 4, 7 y 1. De ese total el 64,1% tiene una conexión irregular a la red eléctrica, el 89,8% una conexión irregular a la red de agua, y el 100% utiliza gas en garrafa. Solo 4 barrios hoy tienen procesos de urbanización en curso: Barrio Mugica, Rodrigo Bueno, Playón de Fraga y Villa 20. Entre los restantes, algunos han logrado consensuar proyectos de Ley entre todos los vecinos y vecinas de diferentes colores políticos, pero es una deuda lograr el reconocimiento en la Legislatura y los fondos correspondientes para avanzar en las obras.

Solo 4 barrios hoy tienen procesos de urbanización en curso: Barrio Mugica, Rodrigo Bueno, Playón de Fraga y Villa 20"

¿Por qué es importante esta adhesión? Porque le asigna al Instituto de la Vivienda de la Ciudad la responsabilidad de hacer cumplir la Ley de Integración Socio Urbana que frena los desalojos por 10 años en los barrios relevados por el Registro Nacional de Barrios Populares (RENABAP), declara de utilidad pública y sujetas a expropiación las tierras de los barrios populares, promueve el Certificado de Vivienda Familiar, reconociendo la prioridad de género para el acceso a la titularidad, y permite la creación de un Fondo de Integración Socio Urbana para la urbanización y obras en barrios populares. 

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La siguiente pelea que tendremos que llevar adelante, desde la comunidad organizada y las representaciones institucionales es, justamente, empujar para que el presupuesto del año próximo incorpore con jerarquía lo expresado en la ley, para que no haya más barrios de primera y de segunda, y todos los habitantes de la ciudad puedan vivir dignamente.

Las políticas de integración urbana que permitieron avanzar en el reconocimiento del derecho a la vivienda de las 5 millones de personas que viven en villas y asentamientos de todo el país"

Esta Ley que consiguió en territorio porteño el apoyo del bloque de Unión por la Patria y el oficialismo (PRO, Coalición cívica y UCR), en un ámbito poco afecto a las legislaciones que reconocen derechos sociales, es un logro destacable en sí mismo, jerarquizando políticas de Estado que benefician a las mayorías sociales y trascienden las gestiones de gobierno. Pero también es un signo de la importancia que tiene construir consensos entre diversos espacios, superando las diferencias partidarias en busca del bien común. Más aún en un contexto en el cual el gobierno nacional busca destruir y deslegitimar las políticas de integración urbana que permitieron avanzar en el reconocimiento del derecho a la vivienda de las 5 millones de personas que viven en villas y asentamientos de todo el país.

La integración urbana es ley nacional, ahora es ley en la Ciudad. Hagamos que se cumpla. 

* Legisladora CABA - Unión por la Patria
Frente Patria Grande