Venezuela

Quiebre democrático y migración

Crisis. En este tiempo millones de venezolanos han sido detenidas. Foto: captura video

Un informe de septiembre 2024 del Diálogo Interamericano titulado “La ola dictatorial autoritaria en el siglo XXI: hacia un reset democrático,” de Manuel Orozco y el Grupo de Trabajo sobre Política y Mediación en Nicaragua, establece que la reciente ola autocrática experimentada en el mundo está teniendo terribles efectos en las sociedades que las sufren, incluidos países de América Latina, como Cuba, Nicaragua y Venezuela. El estudio constata que bajo regímenes dictatoriales las condiciones sociales son peores para los ciudadanos, y además señala que son responsables del 35% de toda la migración de esos países de origen. Este es el caso de Venezuela, cuyo progresivo deterioro democrático ha causado que a la fecha alrededor de 7,7 millones de personas venezolanas hayan tenido que dejar el país. El escenario de quiebre democrático y, por tanto, de intensificación de la migración es algo que debemos anticipar y sobre lo cual debemos preocuparnos.

¿En qué estamos, y qué debemos esperar? El mundo entero ya conoce qué ha pasado en Venezuela desde el 28 de julio, día en que la voluntad popular se expresó en las urnas rechazando valientemente el proyecto del régimen de Maduro, y deslindándose de la decadencia social, económica, política y ética que han traído los últimos 11 años en Venezuela. La represión posterior a ese hecho democrático ha causado que a la fecha haya alrededor de 1.800 presos políticos, y decenas de muertos junto con una crisis humanitaria creciente y sin precedentes que continuará afectando la vida de la ciudadanía. ¿Qué consecuencias puede tener esto sobre las intenciones de la ciudadanía de migrar? Sin duda podemos anticipar que mucha. Datos de una encuesta de ORC Consultores antes de las elecciones del 28 de julio reveló que más del 18% de las personas encuestadas tenía intención de migrar si el oficialismo continuaba en el poder. Es decir, cerca de un millón de personas que teóricamente podrían migrar en el mediano plazo. Días después de las elecciones, a mitad de agosto y luego del fraude electoral perpetrado por el Consejo Nacional Electoral (CNE) declarando, sin actas de respaldo, a Maduro como ganador, otra encuesta confirmó un aumento de más del doble en esos datos sobre intención de migrar. Meganálisis, empresa encuestadora en Venezuela, publicó datos que señalaban que el 43,2% de quienes participaron de su muestra estaba pensando en irse de Venezuela después del fraude electoral.

Para quienes duden de las vinculaciones entre la democracia y la migración, estos hechos y datos ilustran su inextricable conexión. Para la región, que ya lleva tiempo acogiendo a millones de venezolanos, estos hechos y datos son un llamado a atender los efectos del autoritarismo en Venezuela, y son también un llamado a reforzar esfuerzos por fortalecer la democracia. De corto plazo, los datos son un llamado de urgencia a prepararse para una intensificación de la migración venezolana. Para ilustrar escenarios por venir, la autoridad migratoria de Brasil registró, para agosto, la llegada de 12.325 personas de Venezuela a la ciudad de Pacaraima, contra los 8.050 que habían llegado en junio a la ciudad. Si el 10 de enero se consolida un régimen sin legitimidad y represivo, estos datos continuarán en aumento.

*Directora de Inclusión Social, OEA. Red de Politólogas #NoSinMujeres