Grieta

Martín Balza: "Todavía se trabaja mucho en profundizar la grieta"

El exjefe militar relató las imborrables imágenes grabadas en su memoria cuando ocurrió el bombardeo a Plaza de Mayo en el 55, hecho que considera el origen de "la grieta" de nuestra sociedad. "Nunca hemos intentado avanzar hacia la necesaria reconciliación que todos los argentinos quieren", reflexionó.

Martín Balza Foto: Captura de YouTube

Martín Balza fue jefe del Estado Mayor del Ejército durante la década del 90. Su larga carrera militar lo llevó a vivir acontecimientos emblemáticos, como cuando presenció, como cadete, el velatorio de Evita. "Quedé impactado con todo eso, porque la última noche a ella la velan en el Congreso y su cuerpo sale por toda la Avenida de Mayo", expresó en Modo Fontevecchia, por Net TV, Radio Perfil (AM 1190) y Radio Amadeus (FM 91.1). Además, se remontó a lo que él considera como el origen de "la grieta" en la sociedad argentina, el bombardeo a Plaza de Mayo y la polarización peronistas-anti peronistas y llamó a "superar el pasado". “Llevamos más de 40 años de democracia, es necesario que nos escuchemos y que nos respetemos”, declaró.

Martín Balza es exjefe del Estado Mayor del Ejército durante la década del 90. Posteriormente fue embajador argentino tanto en Costa Rica como en Colombia. Fue el único Jefe Militar que combatió al frente de su tropa durante el conflicto bélico en las Islas Malvinas y el primero de alto rango que reconoció públicamente las violaciones sistemáticas a los derechos humanos de la última dictadura.

Siempre es un privilegio contar con su experiencia y su sabiduría. Este fin de semana, en el marco del Día del Ejército, publicaste una nota de opinión para Perfil titulada “¿Cómo recordar sin quedar prisionero del pasado?”, donde usted dice que “desde 1955 no hemos superado el concepto de ‘grieta"', y agregaste que los argentinos anhelamos otra palabra: reconciliación. ¿Por qué cada vez subimos más escalones en este paroxismo de la grieta y la división?

Las circunstancias de mi larga carrera en el Ejército me llevaron a que fuera como cadete de dos acontecimientos, uno un poco emblemático cuando tuve que hacer dos guardias en el velatorio de Eva Perón, que fue velada en lo que era el Consejo Deliberante. Quedé impactado con todo eso, porque la última noche a ella la velan en el Congreso y su cuerpo sale del Congreso por toda la Avenida de Mayo. 

¿Cómo recordar sin quedar prisionero del pasado?

Por otro lado, estando en cuarto año, no sé por qué circunstancias yo estaba regresando al colegio a eso del mediodía, estaba en la estación de Retiro del ferrocarril San Martín para regresar a El Palomar. Era un día gris, no llovía, pero cuando subo al tren escucho que alguien hizo alusión a que se escuchaban muchos truenos, 45 minutos después, el tren llega a El Palomar, entro al colegio y alguien en el arco de entrada del Colegio Militar me pregunta si me había enterado que estaban bombardeando Buenos Aires. No eran truenos lo que se escuchaba en Retiro. 

A la madrugada siguiente, la batería que lidera el Colegio Militar viene y paso a una posición de artillería en la Costanera Sur, vi la ciudad bombardeada. Yo no había visto guerras en ese entonces. Me quedó grabado eso, que fue un 16 de junio de 1955. 

Posteriormente, en el cuarto golpe de Estado cívico militar en septiembre de 1955, quienes bombardearon al pueblo argentino y dejaron a más de 300 muertos en la plaza, llegaron y fueron tratados como liberadores. Es decir, “habían librado una batalla por la patria”, había que agradecerles la libertad a costa de 300 argentinos civiles muertos. Me dejó impactado eso. 

Dejo que opinen los politólogos, los sociólogos o los políticos, pero para mí ahí se creó algo que hoy seguimos definiendo como ‘grieta’, con los altibajos propios de algunos gobiernos constitucionales. 

Hoy seguimos con la grieta, en su momento era peronismo-antiperonismo, eso se acentuó y en algunos sectores llega hasta nuestros días. Nunca hemos intentado avanzar hacia la necesaria reconciliación que todos los argentinos quieren. Se trabaja mucho en profundizar la grieta y el muro, y con eso no vamos a lograr el futuro del pueblo argentino que todos queremos. 

¿La era de la desconfianza no tiene salida? 

En los últimos 20 años, ¿cree que esa grieta se profundiza y comparada con aquella de hace 70 años es menor, porque por lo menos no hay violencia generalizada?

Es probable, a veces disminuye y otras veces vuelve. Alcanza con ver en un programa de televisión la agresión verbal y la agresión escrita hacia el adversario político. No soy político, pero quien no opina como yo y pertenece a otro partido, no es mi enemigo. 

No quiero profundizar en esto porque es comprensible que los periodistas apoyen a un determinado partido, pero creo que cada uno puede oponerse con un diálogo respetuoso y escuchándonos. El que no piensa como yo, no es mi enemigo, es un adversario político. 

Lo que veo actualmente es que se ha recrudecido. Todos conocemos extranjeros que vienen al país, pero muchos que han estado varios meses en la Argentina también perciben lo que estoy transmitiendo. 

Creo que tenemos que superar el pasado, llevamos más de 40 años de democracia, es necesario que nos escuchemos y que nos respetemos. Veo cierta agresividad. 

La juventud ve todas esas cosas, y este no es el ejemplo que la dirigencia política debe dar. Puedo estar equivocado, pero si es así también se debe respetar mi opinión. 

La libertad avanza y retrocede 

Como siempre es muy interesante escuchar toda su sabiduría. Aunque haya pasado hace unos días, felicidades al Ejercito argentino. 

Muchísimas gracias, con excepción de mis padres, mi esposa y mi hijo, el Ejército me dio todo. Me dio tanto como una madre bien amada.

VFT