Murió un opositor venezolano que estuvo asilado en la embajada argentina

Un dirigente opositor de Venezuela falleció este miércoles, dos meses después de abandonar el asilo de la embajada argentina en Caracas y entregarse a las autoridades bajo libertad condicional. Se trata de Fernando Martínez Mottola, quien sufrió "un derrame cerebral masivo", según su amigo Emilio Figueredo, exembajador venezolano. 

Fernando Martínez Mottola, de 70 años, era asesor de la alianza opositora Plataforma de la Unidad Democrática (PUD), que denunció fraude en la reelección del presidente Nicolás Maduro y reivindica la victoria de su candidato Edmundo González Urrutia en los comicios del 28 de julio de 2024.

La PUD confirmó la noticia del fallecimiento de quien describió como un "demócrata de dilatada actuación pública" en un comunicado, mientras que González Urrutia, la líder opositora María Corina Machado y otros dirigentes y partidos políticos expresaron en redes sociales sus condolencias. "Amigo de tantos años y tantas luchas", dijo Machado en X.

Martínez Mottola se había entregado a la Justicia de Maduro hace apenas dos meses 

Martínez Mottola —quien ejerció como ministro de Transporte 1992 a 1993 y, más recientemente, fue asesor de Juan Guaidó— se refugió en la residencia argentina en Caracas el 21 de marzo de 2024, un día después de que otros cinco colaboradores cercanos de Machado hicieran lo mismo, acusados por la fiscalía de conspirar contra el Gobierno de Maduro.

"Desde esta sede diplomática que se ha convertido en una cárcel honramos su memoria", escribieron los cinco asilados que aún están en la residencia. "Llegó con su maleta a la embajada (...) convencido de que el tiempo aquí sería corto", recordaron. Después de casi nueve meses, el 19 de diciembre Martínez Mottola se entregó a las autoridades y declaró sobre "hechos violentos, conspirativos y desestabilizadores", según la fiscalía.

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Por “colaborar activamente con la Justicia”, Martínez recibió la libertad condicional y se mantuvo con prisión domiciliaria hasta su muerte. El resto de los asilados, entre los que se incluye la mano derecha de Machado, Magalli Meda, esperan un salvoconducto para salir de Venezuela. Denuncian desde noviembre un "asedio" policial a la sede diplomática y que funcionarios armados la rodean, impiden la entrada de alimentos y el restablecimiento de servicios básicos como luz y agua.

"Las consecuencias de tanta crueldad se viven todos los días, pero pérdidas como las de Fernando nos recuerdan dónde estamos", escribieron los asilados. La residencia se encuentra desde agosto sin personal diplomático, tras la ruptura de relaciones entre ambos países, como respuesta a los cuestionamientos del Gobierno del presidente Javier Milei a la reelección de Maduro. La custodia del edificio está a cargo de Brasil.

ML