Ginebra teme una tercera ola del coronavirus
Esquiar o no esquiar, tal vez el gran dilema de uno de los grandes deportes suizos. El país aspira a seguir bajando la media de 3700 infecciones por la epidemia cada 24 horas.
Una tercera ola del Covid-19 para comienzos del 2021, a causa de la multiplicación de infecciones durante las fiestas de Navidad y Año Nuevo, en el marco de las vacaciones invernales, y la practica intensiva del ski en las montañas de los alrededores, es la previsión del Hospital de Ginebra, que estima unos 1000 nuevos contagios diarios, cuando actualmente la curva se ha estabilizado en 150 casos cotidianos para la ciudad, y pese a que todavía no ha finalizado el segundo desconfinamiento.
El Canton de Ginebra, con sus 500 mil habitantes, tiene programada la reapertura de bares y restaurantes el próximo jueves, perdurando las incógnitas sobre la vuelta a la normalidad de teatros, cines, gimnasios y piscinas, y el reinicio de grandes eventos deportivos y culturales. El temor del efecto perjudicial de reanudar masivamente la actividad deportiva invernal, es "el reagrupamiento peligroso" de personas en hoteles, alojamientos y confiterías, desde las 17 horas cuando cae el sol en los Alpes, según el infeccionólogo ginebrino, Didier Pittet, uno de los inventores del liquido hidroalcóholico para inmunizar las manos en esta crisis sanitaria, recomendado por la OMS.
Anticipándose a las concentraciones en las estaciones suizas de turistas nacionales y extranjeros, que no podrán acudir a las pistas de sky en Francia y Alemania, que estarán abiertas pero sin telecabinas para subir a las cimas y lanzarse a descender skiando, y la incertidumbre de lo que van a decidir al respecto en Italia y España, el Consejo Federal helvético, el gobierno colegiado de 7 miembros que gobierna el país, dispuso que cada uno de los 26 Cantones debe disponer reglas epidemiológicas estrictas para el esparcimiento en la nieve. Las máscaras serán obligatorias dentro y fuera de las telesillas y telecabinas, incluyendo en las colas de espera, con el debido respeto de 1,5 m de distancia entre las personas. En los bares y restaurantes de las inmediaciones, los comensales deberán aguardar la liberación de las mesas ocupadas fuera de los mismos, y en sus interiores, la separación de mesas y sillas serán iguales que en el resto del país hoy día, a 4 personas por mesa.
Suiza inicia el segundo desconfinamiento tras el rebrote de coronavirus
Anticipándose a las concentraciones en las estaciones suizas de turistas nacionales y extranjeros, que no podrán acudir a las pistas de ski en Francia y Alemania, que estarán abiertas pero sin telecabinas para subir a las cimas y lanzarse a descender esquiando, y la incertidumbre de lo que van a decidir al respecto en Italia y España, el Consejo Federal helvético, el gobierno colegiado de 7 miembros que gobierna el país, dispuso que cada uno de los 26 Cantones debe disponer reglas epidemiológicas estrictas para el esparcimiento en la nieve. Las máscaras serán obligatorias dentro y fuera de las telesillas y telecabinas, incluyendo en las colas de espera, con el debido respeto de 1,5 m de distancia entre las personas. En los bares y restaurantes de las inmediaciones, los comensales deberán aguardar la liberación de las mesas ocupadas fuera de los mismos, y en sus interiores, la separación de mesas y sillas serán iguales que en el resto del país hoy día, a 4 personas por mesa.
A su vez, previendo el agolpamiento de clientes en los grandes comercios con el objeto de comprar regalos para las fiestas de fin de año, el gobierno federal ya dispuso, a partir del jueves venidero, que cada cliente deberá disponer de 10 m2 en su derredor para desplazarse en supermercados, contra 4 m² actualmente, y en los comercios más pequeños, unos 5m2 por persona. Para cenas y almuerzos de Navidad y Año Nuevo, el Consejo Federal suizo recomienda no organizar comidas para más de dos familias por domicilio, y los restaurantes en vez de cerrar a las 23 horas, como en épocas normales para esas fechas, podrán abrir hasta la 1 de la madrugada, para reducir así la perspectiva de reuniones espontaneas posteriores en residencias particulares, tras cenar cenar afuera.
En cuanto a las vacunas, a las 4.500.00 dosis adquiridas a la firma estadounidense Moderna, a dos inyecciones por persona, Suiza anuncia que ha reservado 4.200.000 dosis más de los laboratorios Pfizer BioNTech y AstraZeneca, y se asegura que las compras en esos tres fabricantes subirán hasta un total de 13 millones de dosis. Tales cantidades cubrirían las necesidades mínimas, en el contexto de los 8.500.00 habitantes del país, tomando en cuenta que la vacunación no será obligatoria, y que al hilo de los sondeos, la mitad de la población esta dispuesta a vacunarse, mientras que cerca del 30% del resto, responde negativamente, y los demás no lo tienen todavía resuelto definitivamente.
La experta de vacunaciones de Ginebra, Claire-Anne Siegrist, calcula que la vacuna se comenzará concretamente a suministrar en Suiza hacia febrero de 2021. Un mes antes comenzarían a llegar los cargamentos del extranjero. De momento, el gobierno confió a las Fuerzas Armadas, organizar en secreto su recepción, desplegar el almacenamiento en lugares apropiados por ciertas necesidades de bajas temperaturas necesarias a su preservación, para luego transportarlas en vehículos refrigerados con hielo seco (también llamado hielo carbónico que se evapora cuando se funde), con destino a los centros de vacunación que se vayan desplegando. En el presente mes de diciembre se están acondicionando los sitios de acopio y la adquisición de los imprescindibles ultracongeladores, que se han convertido en los equivalentes a las mascaras al inicio de la epidemia, cuya penuria en los comienzos de la irrupción del Covid-19, diera lugar a una polémica que ahora se espera no repetir.
En Ginebra, Juan Gasparini