Bielorrusia: el hijo menor de Alexander Lukashenko se perfila como sucesor del régimen
El ascenso de Nikolai, el más joven del régimen de Lukashenko, ocurre en un contexto de represión política extrema y elecciones anticipadas que la oposición exiliada describió como una "farsa".
El hijo menor del presidente de Bielorrusia, Alexander Lukashenko, comenzó a acaparar titulares y a ganar protagonismo político a hacer campaña por la reelección su padre, que ostenta el poder del principal aliado de Rusia desde 1994, de cara a las elecciones presidenciales del 16 de enero.
Nikolai Lukashenko, quien desde niño acompañó al mandatario en visitas de Estado y reuniones diplomáticas, ahora parece desempeñar un papel más activo en la maquinaria política del régimen, posicionándose como un posible sucesor a futuro, en medio de un contexto convulso de cara a los comicios, considerados una "farsa" por parte de líderes de la oposición al régimen bielorruso.
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Autodefinido como "una copia absoluta" de su padre, Nikolai, de 20 años, se dedicó a recorrer el país de Europa del este en una peculiar gira: no realizó actos tradicionales de campaña, sino de conciertos de piano, tratándose de actos proselitistas que su equipo denomina "maratón de la unidad". Estos eventos, que mezclan cultura y propaganda, buscan reforzar el apoyo a la reelección de su cuestionado padre, quien gobierna Bielorrusia desde hace 30 años.
Nikolai Lukashenko: una infancia marcada por la política
Nikolai debutó en la esfera pública en 2008, cuando tenía apenas cuatro años, acompañando a su padre en un evento de "limpieza" nacional. A partir de entonces, se convirtió en una presencia constante al lado de Aleksander Lukashenko, tanto en actos locales como en cumbres internacionales. Durante su infancia, tuvo encuentros con líderes como Barack Obama, Xi Jinping y el papa Francisco.
En 2022, Nikolai ingresó a la Universidad Estatal de Bielorrusia, donde se creó un programa de "biotecnología" en colaboración con la Universidad de Beijing, diseñado especialmente para que obtuviera diplomas de ambas instituciones.
Aleksander Lukashenko, su hijo Nikolai, junto al mandatario ruso Vladimir Putin.
A lo largo de su breve carrera política, el joven no estuvo exento de controversias. En las protestas masivas de 2020 contra el fraude electoral, Nikolai, entonces de 16 años, fue visto junto a su padre portando una ametralladora y participó en reuniones con presos políticos. Estas acciones lo convirtieron en blanco de sanciones internacionales. La situación escaló a tal nivel que en agosto de 2024, Canadá, por citar un ejemplo, incluyó su nombre en una lista por violaciones sistemáticas de derechos humanos.
En una entrevista de noviembre de 2024, Nikolai se describió como una extensión de su padre: "No puedo ser un oponente del Estado o del jefe de Estado porque soy una copia absoluta de él", declaró.
Por otro lado, el joven también fue mencionado en episodios clave de la política exterior bielorrusa. Cuando el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, afirmó que Aleksander Lukashenko se disculpó por facilitar la invasión rusa desde territorio bielorruso, Natalia Eismont, portavoz del presidente, atribuyó este gesto a una "reacción emocional" influenciada por Nikolai. Según Eismont, el número de Zelenski está incluso entre los contactos personales del joven.
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Una "farsa": las elecciones y el futuro político de Bielorrusia
Las elecciones presidenciales anticipadas se llevarán a cabo el próximo 26 de enero en medio de un clima tenso, marcado por la persecución de opositores y otras denuncias por violaciones a los derechos humanos. El ascenso del protagonismo del hijo del mandatario bielorruso ocurre en un contexto de represión política extrema en Bielorrusia, donde el régimen de su padre, Aleksander Lukashenko, eliminó cualquier forma de oposición y control mediático, según denuncias de la oposición.
Por su parte, la líder opositora exiliada Svetlana Tikhanovskaya calificó las elecciones presidenciales anticipadas del 26 de enero como un "simulacro democrático" y pidió a los disidentes que se preparen para un futuro cambio. Destacó además que "no es momento" de nuevas protestas masivas debido al clima de miedo y represión que siguió a las masivas protestas de 2020 que derivaron en el cuestionado encarcelamiento de decenas de disidentes.
Tikhanovskaya, quien en 2020 denunció fraude electoral y fue obligada a exiliarse, enfatizó que las condiciones políticas actuales en Bielorrusia son una "farsa", con la mayoría de los líderes opositores encarcelados o en el exilio. Mientras el joven Nikolai participa activamente en actos de propaganda para apoyar la reelección de su padre, la oposición advierte que la estabilidad del régimen podría verse amenazada en el futuro por factores como problemas económicos, divisiones internas en la élite política o la salud del presidente.
Alexander Lukashenko gobierna Bielorrusia desde 1994.
Nikolai, posible sucesor de Alexander Lukashenko
Con respecto al futuro del régimen de Lukashenko, el creciente protagonismo de Nikolai en los medios despertó especulaciones sobre si su padre lo está posicionando como su sucesor. Aunque el presidente bielorruso habló en el pasado de preparar a sus hijos para asumir el control del país, los analistas están divididos sobre si Nikolai está destinado a heredar el poder.
Recientemente, el autócrata bielorruso ha hablado de la necesidad de un cambio generacional. "Debemos preparar a nuestros hijos para que tomen el control, protejan y cuiden a Bielorrusia", explicó el 7 de enero.
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"Lukashenko sueña con que Nikolai sea su sucesor y no lo oculta", afirmó Fiódor Pavliuchenko, redactor jefe del portal de noticias Reform.news y responsable de un proyecto en YouTube que analiza críticamente a Lukashenko. "Nikolai creció y su actividad mediática indica un reposicionamiento", agregó, según la cita del medio alemán DW.
Para el politólogo Valeri Karbalevich, su reciente exposición mediática está limitada a la campaña electoral de su padre. "La cuestión de un sucesor solo se plantea cuando el líder renuncia, y Lukashenko no tiene intención de hacerlo", opinó.
Sin embargo, otros expertos, como Fiódor Pavliuchenko, indicaron que el plan sucesorio está en marcha. "Lukashenko ha creado un clan en torno a Nikolai. Lo están moldeando como un 'príncipe', alguien destinado a liderar sin necesidad de una trayectoria política convencional", aseguró.
cd / ds