Mientras el Gobierno demora el llamado a sesiones extraordinarias, la UIA presiona porque se incluya el "RIGI para pymes"

En medio de los vaivenes de la relación entre los industriales y el Gobierno, ayer la Unión Industrial Argentina (UIA) se reunió con el ministro de Desregulación, Federico Sturzenegger, y le pidió sumar el proyecto de ley que fomenta las pequeñas y medianas inversiones, el empleo formal y las exportaciones industriales, también conocido como el “RIGI para pymes”, al temario de las sesiones extraordinarias. A pesar del anuncio del vocero, Manuel Adorni, el oficialismo se encuentra expectante de si finalmente convoca al Congreso en los próximos días. 

Una noche con el círculo rojo hablando de inversiones

Ambas partes coincidieron en que fue un buen encuentro donde no hubo reclamos. Tras el cónclave, el titular de la UIA, Daniel Funes de Rioja, sostuvo: “Vamos a pedirle al Gobierno que trate el ´mini RIGI´ en las sesiones extraordinarias”. Desde la cámara empresaria expresaron que se pusieron a disposición del Ejecutivo y Legislativo para avanzar en propuestas que mejoren el proyecto y garanticen su aprobación y representación de todos los sectores industriales. A su vez, el sector remarcó la necesidad de bajar impuestos para crecer. 

También, la UIA le presentó a Sturzenegger el documento de trabajo “Propuestas para desburocratizar y facilitar el entorno empresarial”. “El texto contiene un set de proyectos que permitirán simplificar el desarrollo de la actividad industrial abordando integralmente áreas como logística y transporte, comercio, financiamiento y el área laboral”, señalaron desde la entidad que comanda Funes de Rioja.

Por el lado del Gobierno, trascendió que Sturzenegger les explicó a los empresarios industriales que la actual gestión y, en particular su cartera, “trabaja para que a través de la baja del gasto público y las desregulaciones, el sector privado pueda crecer”. 

Qué se sabe del proyecto RIGI para pymes

El proyecto del RIGI para pymes tomó relevancia luego de que en la Conferencia Industrial de la UIA, donde se ausentaron tanto el presidente Javier Milei como el ministro de Economía Luis Caputo, lo cual detonó aún más el descontento del sector que ya venía con rispideces con el Gobierno al ser uno de los sectores más golpeados de la caída de la actividad económica y en vista de ser los más perjudicados con la apertura de importaciones. 

Malestar, incredulidad y enojo, los restos de una cumbre industrial devaluada por el Gobierno

En el congreso fabril, Juan Pazo, que en ese entonces ocupaba el cargo de secretario de Coordinación de la Producción y ahora es el titular de la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA) tras las salida de Florencia Misrahi, anunció que el Ejecutivo enviará el proyecto del RIGI para pymes. 

Desde Economía, señalaron que el proyecto incluye “beneficios impositivos”, desgravación de derechos de exportación para bienes industriales, devolución anticipada del IVA y otros beneficios para inversiones que superen el umbral de los 150 mil dólares en el caso de las empresas micro; 600 mil dólares en las pequeñas; 3,5 millones de dólares en las empresas del tramo 1; 9 millones de dólares en las empresas del tramo 2: y 30 millones en el resto.

Por otro lado, las pymes alertaron por la insuficiencia del “mini RIGI” y que, además, no generará inversiones.

Todavía el oficialismo no definió si convocará al Congreso a pesar de que el vocero Manuel Adorni anunció que “se ha tomado la decisión de convocar a sesiones extraordinarias. Las mismas se llevarán a cabo entre el 5 y el 27 de diciembre”. “El temario de las mismas será el siguiente: Reforma electoral, Reforma política, Juicio en ausencia, Ley anti mafia, Viajes del presidente,   Reforma de los fueros de la política”, había anunciado Adorni. 

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