MESA DE DIÁLOGO

Diálogo y consenso, la apuesta del círculo rojo para aplacar brotes de inseguridad y violencia

Esa agenda se abordó en el segundo encuentro de un año considerado “clave”, por sus implicancias políticas, económicas y electorales.

Mesa del Diálogo Argentino Foto: Cedoc Perfil

Las medidas económicas, el impacto social y las tensiones de un año electoral estuvieron en la agenda de un cónclave empresario-judicial-político que se realizó en Punta del Este, pero que tuvo la mirada puesta en la realidad argentina. Si bien en ese ámbito conviven distintas miradas sobre el plan de gobierno de Javier Milei, existe un consenso por buscar puntos en común para trascender esas divergencias y la principal preocupación es “la proliferación de los niveles de inseguridad que se registraron en los últimos meses”.

Según pudo reconstruir PERFIL, en las costas uruguayas analizaron los sucesos económicos y hasta se animaron a hablar de elecciones, sin dejar trascender preferencias en las urnas, pero dejaron claro que “la inseguridad es uno de los temas que más preocupa, porque se vio un aumento de hechos delictivos, que deberán considerarse adecuadamente para ser abordados”. “No hay una sola causa, pero hay que estar atentos a que no se genere una situación de conflicto cotidiano en las calles, porque la gente no está para aguantar algo así”, le dijo a este diario una fuente que participó del encuentro.

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El armado, que buscar cruzar a la dirigencia de distintos estamentos argentinos, tiene como prioridad “manifestar la esperanza y los consensos para llegar a mejores soluciones”, según definió uno de los participantes de la mesa de diálogo. En otros términos, encontrar puntos de no disidencia para evitar conflictos y generar un ámbito de “cordialidad”, que se convierta en “la base para abordar, luego, los temas más ríspidos y evitar que las tensiones rompan puentes que, en medio de una crisis, son muy necesarios para avanzar, más allá de los gobiernos de turno”, rezaron desde la organización.

Con la mirada atenta del Papa Francisco

“Este es un espacio que busca fomentar el debate, la construcción de consensos y el fortalecimiento del tejido social mediante el intercambio de ideas entre referentes de diversos sectores”. Así se define la Mesa del Diálogo Argentino, que es un desprendimiento del Instituto de Diálogo Interreligioso (IDI), espacio que supo poner en marcha el entonces cardenal Jorge Bergoglio, junto con el rabino Daniel Goldman, el líder islámico Omar Abboud, y el padre católico, Guillermo Marcó, en medio de la mayor crisis social, política, económica e institucional de la Argentina en el 2001. Hoy, el Papa Francisco imprime ese armado desde la Santa Sede en Roma.

La cara visible y más dinámica de la misión de diálogo en el país es el especialista en derecho laboral y director del IDI, Andrés Prieto Fassano, quien tiene terminales en diversos ámbitos empresarios, políticos, judiciales, diplomáticos, sindicales y sociales; y que impulsa esta mesa junto al padre Marcó. “La iniciativa se inspira en la cultura del encuentro promovida por el Papa Francisco, quien, durante su tiempo como arzobispo de Buenos Aires, fundó el Instituto del Diálogo Interreligioso con el propósito de generar espacios de cooperación y entendimiento entre actores de distintas procedencias y perspectivas”, destacó un comunicado de prensa.

Según pudo saber este medio, los encuentros están bendecidos desde el Vaticano. El Papa Francisco cambió su antigua mirada sobre el rol del empresario en la sociedad. Quienes lo rodeaban, aseguran que en la década del ’90 el entonces arzobispo de Buenos Aires dudaba que el mundo de los negocios y sus prácticas podría generar veneración. El caso de Enrique Shaw -fundador de la Asociación Cristiana de Dirigentes de Empresa (ACDE)- demostró que la Iglesia también puede cambiar de opinión: hace pocos días, la Comisión Médica del Vaticano aprobó el milagro atribuido a la intercesión del empresario, lo que habilitó la continuidad del proceso con la Comisión de Teólogos y luego con los obispos y cardenales. Una vez superadas las instancias del Dicasterio para las Causas de los Santos, podría convertirse en el primer beato empresario del mundo.

La empresa ha de ser comunidad de vida, instrumento de dignificación, hogar de relaciones humanas, escuela de prudencia y responsabilidad. Hay que darle al obrero seguridad, buen trabajo, buen sueldo y posibilidades de progresar”, afirmó Shaw, cuando era director general de Cristalerías Rigolleau de Berazategui. En varias de sus referencias al mundo de los negocios, el Papa Francisco afirmó que “los impuestos no deben verse como una usurpación”, sino que “son una forma elevada de compartir bienes, son el corazón del pacto social”. Ambos puntos que en la actualidad tomaron gran trascendencia y generaron debate en el mundo empresario.

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Un encuentro con invitados internacionales

Del encuentro participaron la embajadora de la Soberana Orden de Malta, María Podestá; el presidente de la Cámara de Inmobiliarias y desarrollador inmobiliario, Iván Ginebra; empresario industrial del sector de recolección de residuos, Alex Mugrabi; el periodista Sergio Rubin; y Lidia Fasano, una de las primeras juezas mujeres de la provincia de Buenos Aires. También asistieron el empresario uruguayo del rubro inmobiliario y deportivo, socio-director de Clubes LIFE y Stone/Rock Fitness y administrador de Nacional Club Social y Bohemios, Elbio Strauch; el desarrollador inmobiliario del Grupo Prieto Fasano, Christopher Jones; el CEO de Yel Solutions -empresa líder en el sector informático-, Conrado Fernández; la ingeniera, abogada y socia de Prieto Fasano Abogados, Jennifer Jones; y el abogado penalista y docente universitario Carlos Froment.

Según se informó, en el encuentro “se abordaron diversas temáticas vinculadas a la realidad social y económica, con especial énfasis en la importancia del diálogo como herramienta de transformación”; y se destacó “la necesidad de generar espacios de encuentro donde diferentes sectores puedan aportar su visión y contribuir a la construcción de soluciones innovadoras y sostenibles”.

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"La cultura del encuentro es un concepto clave para el futuro de nuestra sociedad. Solo a través del diálogo podemos superar divisiones y encontrar puntos en común que nos permitan avanzar como país", destacó el mencionado Andrés Prieto Fasano, anfitrión del evento y referente en la articulación de estos espacios de debate.

La Mesa del Diálogo Argentino “continúa consolidándose como un espacio clave para la cooperación multisectorial y el diseño de iniciativas orientadas al bien común”, destacó un comunicado de prensa. “En un contexto donde los desafíos requieren respuestas conjuntas, encuentros como este reafirman la importancia de tender puentes y trabajar en la construcción de una sociedad más justa e integrada”, señaló la comunicación.

AM