Racing lo ganó por jerarquía individual y su poder goleador
Empezó perdiendo, pero lo empató y lo dio vuelta con goles de sus tres delanteros de área: Vietto, de tiro libre, Maravilla Martínez, con su sello demoledor, y el debutante Rocky Balboa, que marcó de palomita sobre el final. El partido estuvo detenido porque se escuchaban disparos en la calle, detrás de la tribuna local: se enfrentaron la barra de Barracas y la Policía.
El primer partido de cualquier torneo nunca es medida de nada. Sin embargo, puede ser traumático. Así de drástico es el fútbol argentino. Es una ucronía, porque finalmente nunca ocurrió, pero si Racing hubiese perdido contra Barracas Central en Sarandí, el lamento y la paranoia colectiva de sus hinchas hubieran crecido como yuyos en todos estos días. Tranquilamente pudo haber ocurrido, porque Barracas empezó ganando, y cuando estaban 1 a 1 tuvo chances clarísimas, pero no ocurrió. Y lo que se impuso fue la jerarquía individual, el bagaje colectivo de uno y otro equipo. Racing lo ganó más por oficio que por juego. En definitiva, el fútbol muchas veces es eso: un oficio, un juego de trucos que no se ven.
Con los goles de Luciano Vietto a los 30 minutos del primer tiempo, Adrián “Maravilla” Martínez a los 26 del complemento y Adrián “Rocky” Balboa a los 46 del segundo, Racing también tuvo para festejar eso: sus tres delanteros de área (y uno de sus refuerzos) marcaron, algo que estimula a cada uno a seguir en esa competencia sana por la titularidad, o por la idolatría.
Racing dominó desde el arranque, pero a los 21, Insua tomó un rebote después de un desborde de Iván Tapia, un mal despeje del arquero Gabriel Arias, y Bruera estampó el 1 a 0 con suspenso a favor del local. Sorpresa en Sarandí. Pero Racing no se durmió y encontró el empate rápidamente con un bombazo de tiro libre de Vietto, que ahora se encamina en ser el reemplazante de Juanfer Quintero en las pelotas paradas.
Ya para la segunda etapa, después de un inicio muy chato y poco juego, Maravilla bajó una pelota y clavó un gol con su sello. Y sobre el final, Matías Zaracho ingresó y le puso una pelota perfecta a Balboa, que cabeceó de palomita para sellar el 3 a 1. La ilusión está intacta.
Disparos en la calle
Durante los primeros minutos del primer tiempo, en Sarandí se escucharon varios disparos, lo que motivó al árbitro Fernando Echenique a detener el partido para comunicarse con el jefe de seguridad.
Las detonaciones fueron, según testigos del lugar, por parte de la Policía hacia la barra del Guapo detrás de la tribuna local. Otras personas aseguraron que los policías “provocaron” a los hinchas y estos habrían reaccionado a las agresiones de los uniformados con piedrazos y botellazos, lo que alimentó la batalla, que dejó el saldo de un policía herido en su pómulo izquierdo.
También te puede interesar
-
Los Corti, Ernesto y Daniel, se enfrentaron en duelo histórico en El Salvador
-
Boca y su flojísimo primer partido: los mejores memes y reacciones del partido ante Argentinos Juniors
-
Paulo Dybala renovó su contrato con La Roma hasta el año 2026
-
Copa Davis: Argentina viaja a Noruega
-
Torneo Apertura: todos los partidos que se jugarán en la segunda fecha
-
Lautaro Martínez hizo un golazo contra el Lecce y llegó a los 200 gritos como profesional
-
Llegó el día soñado por Ander Herrera: su debut en la Bombonera con la camiseta de Boca
-
Gallardo criticó el campo de juego de Platense tras el empate: "La cancha no estaba para jugar de la manera que nos gusta"
-
Reapareció el Patón Bauza: el emotivo homenaje que le hicieron en Liga de Quito
-
Una vuelta por la otra isla Victoria