mercado de pases

Las nuevas joyas de Europa: los argentinos que esperan su examen en las principales ligas

Mateo Retegui llegó al Genoa y ya empezó a cumplir: este viernes debutó en la Copa Italia con dos goles. Beltrán, Veliz y Vázquez les dieron dólares a sus exclubes y ya fueron presentados en el continente europeo. La salida de Harry Kane ilusiona a Veliz, aunque el DT del Tottenham quiso bajar la expectativa y adelantó que no tendrá muchos minutos en cancha en los primeros partidos. Alan Varela e Ignacio Miramón, los mediocampistas que se sumaron a un éxodo generado para aliviar las tesorerías de los equipos de la Liga Profesional.

Festejo y foto. Retegui le hizo dos a Módena. Alan Varela, Beltrán y Veliz, cartas de juego y de gol para poderosos –y no tanto– equipos europeos. Foto: twitter genoa/porto/fiorentina/prensa tottenham

No fueron las transferencias históricas de Julián Álvarez al Manchester City, de Lautaro Martínez al Inter o de Sergio Agüero al Atlético de Madrid. Quizás sean menos trascendentales para el fútbol argentino, o para la Selección, pero no dejan de ser las más importantes de este mercado de pases, y también una luz de esperanza para el futuro del equipo nacional, hoy en la cima del mundo luego de Qatar 2022.

La compra de Alejo Veliz por parte del Tottenham, los goles que promete –y ya cumple– Mateo Retegui en el Genoa y la expectativa por Lucas Beltrán en la Fiorentina confirman el buen momento de los delanteros argentinos por el mundo. Los goles no llegan solo a través de Messi: en el inicio de la temporada europea, la legión nacional reforzó a muchos clubes que buscan coronarse en sus respectivos países, o al menos quedar bien lejos de la zona roja de los descensos.

Beltrán fue el último en emigrar, y acaso como se trató de su salida de River, fue uno de los pases más promocionados del receso. El delantero de 22 años firmó un contrato de cinco temporadas con la Fiorentina, que le pagó 12.595.000 millones de euros a River por el pase, junto con otros 12.595.000 millones en concepto de objetivos. De esta manera, la operación puede extenderse en el futuro a 25 millones. Además, se acordó un 10% de plusvalía, en caso de una futura transferencia. Ese número lo ubica apenas por debajo de Julián, vendido al City en enero de 2022 por 27 millones de dólares limpios.

Más chico que Beltrán es Veliz, una joya para el fútbol argentino que, como pasa casi siempre, pudimos disfrutar muy poco. El rosarino tiene 19 años, empezó a estar en el radar a partir del Mundial Sub 20 y del último tramo de la Liga Profesional. La pregunta de siempre: ¿no podría haberlo retenido Central para aumentar sus posibilidades de ganar algo y también para aumentar su valor de venta? La misma pregunta puede hacerse en el caso de Gianni Infantino, ahora en la Fiorentina junto a Beltrán. Es cierto que para el conjunto canalla la transacción de Veliz fue histórica: el Tottenham le pagará 17 millones de dólares más otros seis en bonos y el 10 por ciento de una futura venta.

El Tottenham ya no tiene a Harry Kane, que se fue al Bayern Munich, y Veliz asoma como un posible sucesor. Sin embargo, en los últimos días, el técnico Ange Postecoglou bajó la expectativa: “Es un chico joven, en un nivel bastante diferente. Estamos comprometidos a largo plazo, pero no esperaría que viera minutos en la primera parte de la temporada”, explicó.

Para el Genoa, Retegui no es una apuesta, sino una confirmación de lo que ya había mostrado en la selección de Italia. El argentino nacionalizado italiano tardó apenas 30 segundos en marcar para la escuadra genovesa. El viernes hizo dos goles en el triunfo 4-3 ante Módena y empezó a amortizar los 15 millones de dólares brutos que pagó el Genoa (buena parte le quedó a Boca, y otra a Tigre). Boca sumó a esa venta las de Luis Vázquez, al Anderlecht de Bélgica por siete millones de dólares, y Alan Varela, al Porto de Portugal, por nueve millones.

La última transferencia para sumar a este lote de nuevas joyas europeas es la de Ignacio Miramón, que pasó de Gimnasia al Lille de Francia por ocho millones de dólares más una plusvalía a futuro del 15%. Para el Lobo, la venta estuvo muy cerca de la más alta de su historia, que fue la del uruguayo Ignacio Alonso a Valencia, en 2001, por 7,65 millones de euros. La crisis argentina, el dólar por las nubes y la fragil economía de Gimnasia no da margen para retener a los jugadores que mejoran las canchas del país.