TEMPORADA 2024/25

Verano 2025 en Córdoba: buenos números en distintas partes de la provincia, pero lejos de los picos de años anteriores

A pesar de la competencia con destinos internacionales, Córdoba registró en los primeros días de enero una ocupación promedio que osciló entre el 60% y el 64%. El sector turístico, sin embargo, se mantiene cauteloso con respecto a los números.

. Foto: Redes

Como ya se venía diciendo, la temporada de verano en Córdoba comenzó con gran incertidumbre debido al contexto económico y a la tendencia de muchos argentinos de vacacionar en países vecinos como Brasil, Chile y Uruguay. Sin embargo, los primeros números de enero arrojaron cifras alentadoras que superaron las previsiones iniciales. A pesar de todas las complicaciones, Córdoba logró posicionarse como una elección preferida para muchos turistas nacionales.

Aunque en un principio se proyectaba una ocupación similar o incluso menor a la del año pasado, los resultados superaron las expectativas, con porcentajes de ocupación promedio que oscilan entre el 60% y el 64%. Regiones como la de Colonia Caroya y Tulumba registraron ocupaciones cercanas al 90%, impulsadas por eventos como el Festival Nacional de Doma y Folklore.

Verano 2025: Cómo está impactando el "efecto caipirinha" al turismo en Carlos Paz

"La realidad es que tenemos ocupación distinta en toda la provincia. Depende muchos de los calendarios turísticos de cada una de las regiones", analizó Gustavo Peralta, presidente de la Cámara de Turismo de Córdoba, en diálogo con el programa radial After Office de Grupo Punto a Punto

Según Peralta, la diversidad de actividades turísticas en cada región es un factor clave en estos resultados. No es fácil precisar el número exacto de turistas que recibirá cada localidad, especialmente cuando aún no han tenido lugar sus eventos turísticos más relevantes. Este es el caso de Cosquín, con su Festival Nacional de Folklore; Villa María, con el Festival Internacional de Peñas; y Alta Gracia, con el Encuentro de Colectividades.

"El efecto Brasil ha sido fuerte": la alerta desde Los Hornillos sobre el turismo local

En esencia, aunque zonas como la de Cosquín puedan no tener un gran número de reservas en este momento, es probable que, a medida que se acerque el Festival Nacional de Folklore (a finales de enero), la ocupación aumente considerablemente.

Factores que afectan los números

"Soy partícipe de no dar números y de ser cuidadoso. Los números a veces son caprichosos y no abarcan la realidad de todo", explicó Peralta. 

En su lugar, es más útil observar las tendencias, ya que muchos porcentajes dependen de diversos factores. Esta variabilidad es la razón por la cual los números pueden diferir de un diagnóstico a otro. Algunos porcentajes se calculan a partir del peaje, otros se basan en las reservas de hoteles, y otros más se obtienen según la cantidad de pasajeros que llegan a cada localidad.

Aun así, reiteran que la provincia cerró los primeros días de enero con muy buenos resultados y que Córdoba estará "muchísimo mejor" que la temporada 2023/2024, superando ampliamente las estimaciones iniciales del sector.

"Estamos haciendo un balance bastante positivo frente a nuestra situación actual". Para el sector, a diferencia de otros destinos turísticos del país, como la costa argentina, Córdoba no se vio tan afectada por el "efecto caipirinha", en parte gracias a su buena conectividad con otras provincias y a sus tarifas competitivas, que resultan más accesibles para los turistas nacionales.

"Nosotros tenemos esa gran ventaja de estar cerca de todo, de tener buena conectividad aérea o terrestre y también conectividad interna. Eso también influye en la gente", resaltó el presidente.  

Esto último también contribuye al creciente auge del turismo gaviota o de escapada. Aquellas personas que vienen solo  por 3-4 noches. "Es gente que no puede estar sin viajar, pero tampoco se puede permitir largas estadías", siguió Peralta.

A pesar de los buenos resultados, Peralta señaló algunos desafíos pendientes, como el impacto del alojamiento informal, que dificulta la obtención de datos precisos y afecta la planificación de promociones y estrategias turísticas. "Es un problema que crece día a día y que limita nuestra capacidad de acción y del que habrá que ocuparse".