INTELIGENCIA ARTIFICIAL

La infraestructura para atraer data centers en Argentina

El exsecretario de Comunicaciones de la Nación analiza la potencialidad que tiene el país para ubicarse en el mapa de esta nueva tecnología.

Inteligencia Artificial Foto: Cedoc

En un mundo donde la inteligencia artificial (IA) demanda cada vez más potencia de cómputo,la calidad de  la infraestructura de conectividad se posiciona como un pilar fundamental para el desarrollo de grandes centros de datos. La expansión de la red de fibra óptica con tecnologías de vanguardia, la redundancia en infraestructuras de alta velocidad y la garantía de baja latencia son requisitos imprescindibles para que Argentina pueda posicionarse como un hub tecnológico competitivo en este ámbito y tener centros de datos para AI de clase mundial.

Un recuerdo al gran Sarmiento y a la primera red de conectividad nacional: el telégrafo

 

La historia argentina ya ha visto iniciativas visionarias en materia de conectividad. El Presidente Domingo Faustino Sarmiento impulsó con pasión la  red telégrafos  del país (las primeras líneas telegráficas habían sido aprobadas por el Presidente Urquiza), gran  iniciativa de conectividad nacional, financiándolo con el presupuesto de puertos y vialidad. Como suele suceder, la incomprensión de sus opositores llevó a que su Ministro del Interior, el cordobés Dalmacio Vélez Sarsfield, debiera defender el uso de esos fondos ante personas que no entendían el rol de “conectividad” del telégrafo. Vélez Sarsfield fue interpelado el 5 de octubre de 1870 por los  cuestionamientos en el Congreso sobre el uso de fondos destinados a "caminos" para financiar el telégrafo. Vélez Sarsfield respondió: “los telégrafos también son caminos, son caminos de la palabra”. La Presidencia de Sarmiento fue revolucionaria en muchos sentidos y sentó las bases de la integración nacional con esfuerzos como éste.

 

Desafíos de la conectividad de calidad para los “Data Valley” de Argentina

 

Para asegurar la eficiencia de los centros de datos, es indispensable ampliar, mejorar y modernizar la red de fibra óptica con tecnologías avanzadas que permitan soportar el crecimiento exponencial del tráfico de datos y terminar de iluminar redes públicas ya tendidas, como la de Arsat. La implementación de cables de última generación, con mayores anchos de banda y menor atenuación, es clave para mejorar la conectividad entre regiones y garantizar un rendimiento óptimo para las aplicaciones de IA.

 

Redundancia y baja latencia: pilares de la infraestructura de conectividad

 

La operatividad ininterrumpida de los Data Centers depende de una infraestructura de conectividad que garantice alta disponibilidad y baja latencia. Tecnologías como Ethernet (tecnología para conectar dispositivos) de alta velocidad y redes definidas por software (SDN) permiten optimizar el flujo de datos y reducir posibles interrupciones, asegurando así la eficiencia en tiempo real de aplicaciones críticas como el procesamiento de IA.

Además de los esfuerzos para resolver las limitaciones en la oferta eléctrica debido a la demanda intensiva de estos centros, es esencial contar con un plan estratégico para el despliegue de redes de fibra óptica de calidad y de modo redundante. La inteligencia artificial implica una transferencia masiva de datos para el entrenamiento de modelos y el procesamiento distribuido, lo que exige una conectividad de alto ancho de banda, la menor latencia posible y una disponibilidad del 99,999% para evitar interrupciones en tareas críticas, las 24 horas y los 365 días del año.

 

Localización federal de los Data Centers : un nuevo “litio tech”

 

La localización de los centros de datos es un factor crucial para su óptimo desempeño y sostenibilidad. Regiones como Tierra del Fuego, la Patagonia, Córdoba, Santa Fe, San Luis, Entre Ríos, Mendoza  y otras provincias presentan condiciones favorables debido a su acceso a energía eléctrica de fuentes hidroeléctricas, nucleares y renovables, ya que conocemos la desinversión en la energía tradicional cuyas fuentes son combustibles fósiles. Además, la disponibilidad de agua dulce para la refrigeración de los equipos es un elemento determinante en la elección de estas ubicaciones.

 

El motor de los centros de datos en Argentina: la disponibilidad eléctrica 

 

El funcionamiento de los Data Centers para IA implica un consumo masivo de electricidad, lo que requiere garantizar un suministro energético de calidad y estable. La integración de fuentes de energía renovable, junto con sistemas de almacenamiento y distribución eficientes, es fundamental para sostener la creciente demanda de estos centros sin comprometer el sistema  eléctrico interconectado nacional. El atraso de las inversiones energéticas en Argentina es consecuencia de que el verdadero negocio no fue la producción, transmisión y distribución de electricidad  sino participar del “festival de subsidios” que durante los últimos 20 años fue  desmantelando  los enormes progresos ocurridos en los años 90 en este rubro. Sin embargo, como hecho relevante, deben registrarse  las importantes inversiones en energías renovables (solar, eólica y geotérmica), muy eficientes casos de energía de biomasa y algunas inversiones en energía hidroeléctrica de enorme potencial, como algunas  aprobadas en Río Negro.

 

Cómo fortalecer la “Autopista de la Inteligencia Artificial” para impulsar a Argentina como un “Data Valley”

 

El desarrollo de la infraestructura de conectividad debe abordarse mediante estrategias  innovadoras y creativas. Y además, fomentar llegar al máximo internacional de “state of the art”, como hicieron otros países exitosos en materia de Data Centers para el uso de AI. La colaboración entre el sector público y empresas especializadas en telecomunicaciones puede facilitar la inversión en redes de fibra óptica y equipamiento de última tecnología. 

Más allá de que la conectividad es parte de los costos de un proyecto de Data Center, si el Estado tiene un plan estratégico respecto a las zonas óptimas para atraer estas nuevas inversiones puede cumplir  un rol importante . En mi opinión, debe enfocarse en facilitar el financiamiento para  la mejora y ampliación de la infraestructura de fibra óptica ya instalada, propiedad de eficientes empresas privadas, de empresas pymes y cooperativas y de empresas estatales como Arsat y muchas SAPEM, sociedades propiedad de estados provinciales. Adicionalmente a eso, al igual que ocurrió con el desembarco del telégrafo y luego del teléfono, debe promover reglas uniformes de facilitación y regulación en materia urbanística (la Comunidad de Madrid aprobó  la ley 7/2024 para apoyar esta nueva industria) y criterios internacionales y profesionales de impacto ambiental que faciliten las inversiones.

 

Llegó la hora de que el aporte empresario del Servicio Universal cumpla un rol estratégico y útil 

 

En 1997, en las negociaciones que llevamos adelante desde la Secretaría de Comunicaciones  en la apertura de las telecomunicaciones dentro del marco de la OMC (Organización Mundial del Comercio), incluimos el compromiso de establecer un Fondo de Fomento al acceso universal a las telecomunicaciones por parte de los sectores vulnerables o las zonas más alejadas. En los 90, las telecomunicaciones crecían vertiginosamente y había otras fuentes de financiamiento para dar acceso a los sectores y áreas postergadas; por ese motivo, el uso de dicho Fondo no se aplicó. El “Aporte al Servicio Universal" (el 1% mensual  de la facturación de las empresas de telefonía móvil, internet y de todos los licenciatarios de servicios TIC en competencia) comenzó a devengarse durante el gobierno de la ex Alianza (triste historia que debe ampliarse). Desde el 2000 hasta hace algunos meses, esos cientos de millones de dólares se mal administraron, dilapidaron, su recaudación era opaca y gran parte de su uso oscuro. Los ANR (Aportes No Reembolsables) y otros subsidios, en muchos casos, según informan los diarios La Nación y Clarín, tuvieron un destino muy alejado del objetivo de mejora del acceso TIC. Como todo en la vida, se puede juzgar por sus resultados. Una parte enorme del territorio nacional no tiene buen acceso a datos e internet y el despliegue de 4G tiene un enorme atraso en áreas rurales. Ni que hablar de la Red 5G (se paga cara la demagogia…) La única buena noticia fue el desembarco de  Starlink, que está llevando a todo el territorio nacional el acceso a comunicaciones de calidad. La próxima llegada es la de Kuiper, su competidor del Grupo Amazon.

El actual gobierno recibió al Fondo del Servicio Universal con poquisimos logros de calidad y, más allá de las investigaciones periodísticas y judiciales en marcha, ante la duda decidió cerrar el fideicomiso y destinar sus fondos al tesoro nacional. Ese 1% de la facturación de las empresas se ha convertido en un impuesto liso y llano. Es importante destacar que el aporte del Servicio Universal no es un impuesto sino una carga empresarial con destino específico y debería, por primera vez desde su aplicación en el año 2000 (salvo excepciones) ser útil al interés de la Nación. Hay que recordar que el anterior gobierno declaró servicio público a la industria de las telecomunicaciones, desalentando las inversiones y la libertad empresarial que esta actividad tuvo desde su expansión en los 90.

 

Córdoba: El nacimiento de un Silicon Valley sudamericano

 

El plan de promoción de la instalación de Data Centers para Inteligencia artificial necesita de esfuerzos adicionales de conectividad de calidad, con características de redundancia, de tal modo que se pueda garantizar que la misma esté disponible en la calidad que se precisa, con enlaces redundantes a fin de que si falla uno hay otra conexión disponible. El único camino para lograr esto, una vez que se tenga un mapa de las zonas adecuadas para la instalación de los centros de datos, es que las empresas especializadas en la prestación de estos servicios, previa aprobación de los nuevos objetivos, retengan parte del 1% del Aporte del Servicio Universal y contraigan la obligación de llevar adelante la tarea de construcción, selección del material, instalación, puesta a punto y mantenimiento, y  la expansión de la “Autopista de la Inteligencia Artificial” con las características demandadas para esta nueva industria. Así, uno de los puntos a ajustar en la estrategia de esta nueva actividad  puede financiarse sanamente y cumpliendo su verdadero destino  legal. El tema del acceso eléctrico amerita otras medidas que las empresas especializadas deberán resolver, trabajando codo a codo con quienes tienen el deber de facilitar la instalación de nuevas empresas.

Además, la homogeneización regulatoria en materia urbanística y la declaración de interés nacional de esta industria emergente permitirían agilizar la expansión de estos proyectos en todo el país.

La “Autopista de la Inteligencia Artificial” es clave, y la calidad de la  conectividad es un recurso tan vital como el agua o la energía para la infraestructura de los centros de datos de IA. La expansión de la fibra óptica, la redundancia de redes, la elección estratégica de ubicaciones y la garantía de suministro energético de calidad son los pilares que permitirán a Argentina consolidarse como un actor relevante en el ecosistema global de inteligencia artificial. Del mismo modo que Sarmiento y Vélez Sarsfield debieron sortear obstáculos para realizar la primera gran autopista de las comunicaciones con la red de telégrafos, ahora es el momento de poner ingenio en recuperar el liderazgo de las telecomunicaciones de avanzada y de nuevas industrias como las que describimos. La excelente noticia es que Argentina en general, y Córdoba en particular, tienen una red de empresas tecnológicas de todos los rubros que aprovechan y aprovecharán aún más la capacidad de creación de valor con más disponibilidad de esta infraestructura para inteligencia artificial. Quien quiera oir, que oiga.

*Ex Secretario de Comunicaciones de la Nación