Agustín Rombolá: "Estados Unidos va a terminar perdiendo la batalla económica con China"
El abogado y magíster en Políticas Públicas que integra la mesa del programa "Comunistas" consideró que, con los estándares de la democracia occidental, no hay manera de doblegar al gigante asiático.
En el programa "Comunistas”, emitido en la pantalla de Bravo TV, el conductor Juan Di Natale discutió junto con los intelectuales y periodistas del la mesa la reciente decisión de Donald Trump de pausar los aranceles recíprocos a varios países, mientras que exceptuó a China, país al que no solo se los mantuvo sino que además los elevó al 125%.
Analistas y expertos como Raúl Timerman y Agustín Rombolá señalaron que la maniobra podría ser vista como un intento de Estados Unidos por alterar un nuevo equilibrio económico ya consolidado. Timerman destacó que las políticas de China, que han permitido al país convertirse en la mayor potencia exportadora del mundo, hunden sus raíces en la apertura económica impulsada por el extinto presidente Richard Nixon durante su visita a Pekín en 1972. "China 'produce' en la actualidad hasta 15 veces más ingenieros que Estados Unidos", subrayó.
Rombolá, abogado y magíster en Políticas Públicas, se mostró escéptico sobre la posibilidad de que Estados Unidos logre revertir la avanzada china, argumentando que su capacidad de producción es "imposible de igualar".
Además, la estrategia económica del gigante asiático, que incluye la captación de talentos a través de becas y un sistema de incentivos para estudiantes extranjeros, le ha permitido ganar terreno no solo en África y América Latina, sino también en los sectores más innovadores de la tecnología y la ingeniería. "China tiene más estudiantes africanos y sudamericanos que Estados Unidos y Reino Unido juntos", señaló Rombolá.
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Las repercusiones sobre la estrategia comercial que Donald Trump despliega en la actualidad en su relación con China continúan generando debates. Algunos, como Timerman, alertaron que las decisiones del republicano, al igual que sus previas medidas sobre Canadá y México, buscan restaurar un equilibrio favorable del pasado que le permita eventualmente negociar un nuevo pacto comercial con Pekín.
Rombolá resumió: "Pienso que vemos los últimos estertores de un Estados Unidos que eventualmente va a terminar perdiendo la batalla comercial con China. No hay manera que con los estándares de la democracia occidental pregonada por Washington pueda equiparar los costos y la capacidad de producción de Pekín".
LB / FPT