2018 empieza a parecerse a 1987 por cambio de bancos centrales

Un nuevo presidente de la Reserva Federal quiere aumentar las tasas de interés conforme la economía de Estados Unidos supera al resto del mundo tras los recortes de impuestos de un presidente republicano.

Morgan Stanley Foto: cedoc

Un nuevo presidente de la Reserva Federal quiere aumentar las tasas de interés conforme la economía de Estados Unidos supera al resto del mundo tras los recortes de impuestos de un presidente republicano.

¿2018? No, 1987, según un informe de estrategas de Morgan Stanley difundido el martes.

La lección histórica para los inversores es que tal vez deberían prepararse para una política monetaria más estricta de lo que ahora prevén. Hace treinta y un años, el Bundesbank de Alemania retiró la liquidez inesperadamente en un contexto económico similar y ahora el riesgo es que el Banco Central Europeo y el Banco de Japón adopten medidas más restrictivas de lo que los mercados financieros están anticipando, según opinan estrategas liderados por Hans Redeker.

A Morgan Stanley le preocupa especialmente que el dinero fácil del BCE y el Banco de Japón ayudó a suprimir los rendimientos de los bonos estadounidenses desde 2013, por lo que cualquier reversión podría resultar en ventas de bonos del Tesoro.

Justo esta semana, el miembro del Consejo de Gobierno del BCE, Klaas Knot, ha dicho que los responsables de política podrían considerar acelerar el proceso de eliminar el extraordinario estímulo si la economía de la zona euro cumple sus proyecciones.

"Los mercados de activos de riesgo podrían encaminarse hacia aguas turbulentas", dijeron Redeker y su equipo.