Violencia en La Rural

Un editor denuncia que fue atacado por la seguridad privada de la Feria del Libro: “Me ahorcaron, me pegaron patadas”

Francisco Garamona, director de Editorial Mansalva, contó que fue violentado por agentes de seguridad privada y debió acudir a la Policía porteña para salir del lugar. También fue atacada una escritora y otros feriantes, según dijo a PERFIL. Desde La Fundación el Libro comunicaron que los feriantes estaban fumando en el predio.

Seguridad en la Feria del Libro Foto: Captura de video

El pasado lunes 13 de mayo fue el último día de la Feria del Libro 2024 en La Rural y el cierre estuvo teñido de violencia. La editorial Mansalva denunció a través de sus redes sociales que agentes de seguridad de la feria atacaron a trabajadores de las editoriales. Francisco Garamona, su director, contó a PERFIL que lo ahorcaron y le pegaron patadas en todo el cuerpo hasta que logró pedir ayuda a la Policía de la Ciudad de Buenos Aires para que lo resguardaran. Desde la Fundación el Libro sostuvieron, a través de un comunicado, que el personal de seguridad se acercó a "pedirle a los feriantes que dejaran de fumar y que una agente de vigilancia se acercó a pedir que se pusiera fin a la transgresión de las normas, tras lo cual fue agredida verbal y físicamente".

“La Feria del Libro contrató a personas violentas para ‘garantizar’ la seguridad durante la feria. En lugar de velar por la armonía y el orden, actuaron violentamente contra un grupo de editores que cantó en contra del Presidente. No es una batalla cultural, es violencia institucional, denunció Mansalva a través de X (ex Twitter).

En diálogo con PERFIL, Garamona detalló que cerca de las 22, cuando cada editorial comenzaba a desarmar su stand, tras los clásicos aplausos, comenzaron a cantar canciones en contra del presidente, Javier Milei, a lo que personal de seguridad reaccionó de manera sumamente violenta. “Ahí es cuando viene una patota de seguridad y había una chica, una escritora chilena que se llama Leonora -no conozco el apellido- que intenta hablar con estos tipos de seguridad y le hacen como un tackle y una toma y la tiran al piso”, relató el escritor. “Frente a eso yo no me pude quedar impertérrito y saqué mi celular y me puse a filmar y eso los violentó más”, contestó.

En ese momento, lo alejaron y lo golpearon entre varios. “Me ahorcaron, casi me matan, me pegaron un estrangulamiento tremendo, me doblaron los brazos, me pegaron patadas en la cabeza, en las piernas, en la columna”, detalló. Una vez que pudo soltarse y refugiarse en su stand, Garamona logró llamar a la policía para pedir ayuda.

Garamona debió ser resguardado por la Policía de la Ciudad

Cuando llegó la policía de la comisaría 14 la situación se calmó. “Los de seguridad se juntan todos y yo estaba con la policía ya fuera de la feria, pero dentro del predio de La Rural y le agradecí a la Policía, porque sin su socoro me podían haber matado, incluso en el momento en que me estaban pegando a mí en el piso también le pegaban a Washington Cucurto y a mi socio, Nicolás Moguilevsky, una cosa muy violenta que supongo que tiene que ver con que es gente que se siente amparada por todos los discursos de odio y porque piensan que la violencia no tiene represalias”, lamentó.

Francisco Garamona, de Mansalva: El editor preferido

El poeta y director de Mansalva todavía no recibió ningún mensaje de los organizadores de la Feria que explicaran lo sucedido. "Nadie se puso en contacto conmigo, ni cuando me estaban pegando en el piso, ni cuando estuve cuatro horas afuera con un patrullero, así que me dejaron completamente solo", concluyó.

El comunicado de la Fundación el Libro

Desde la Fundación el Libro se manifestaron a través de un comunicado en el que apuntan: "En función de la circulación y especulaciones sobre un video sin audio filmado durante el desarme de la 48.° Feria Internacional del Libro de Buenos Aires, La Fundación El Libro comunica: Ante una contravención (personas que estaban fumando en un stand), que incumplía el reglamento y ponía en riesgo la seguridad de todo el predio, una agente de vigilancia se acercó a pedir que se pusiera fin a la transgresión de las normas, tras lo cual fue agredida verbal y físicamente. A partir de este hecho, se sumó personal de seguridad para proteger a su compañera, poniendo fin al disturbio. 

 

 

RB/ff