Argentina aseguró al G20 que el objetivo es "normalizar la deuda heredada"
Un funcionario de la cancillería aclaró, sin embargo, que esperan mayor entendimiento por parte de los acreedores.
El Gobierno ratificó ante los gobiernos del G20 que su objetivo es normalizar la "deuda externa heredada" y que cumplirán con los compromisos contraídos "de manera sostenible" sin dejar de proteger el tejido social y productivo. Sin embargo, insistió en que esperan recibir, por parte de los acreedores, el mismo entendimiento que profesó el Fondo Monetario Internacional (FMI) en cuanto a la sostenibilidad en las condiciones actuales.
"El propio organismo internacional (por el FMI) considera que la deuda, en las condiciones actuales, no es sostenible. Esperamos recibir este mismo tipo de entendimiento de los acreedores", señaló el Secretario de Relaciones Económicas Internacional de la Cancillería, Jorge Neme, en su exposición durante la Segunda Reunión Ministerial Extraordinaria de Comercio e Inversiones del G20.
Si bien el encuentro virtual tenía como eje las estrategias comerciales en el marco de la pandemia de coronavirus, Neme aprovechó la presencia de representantes de las principales economías internacionales para confirmar el deseo del Gobierno de alcanzar un acuerdo con los bonistas. "Estamos ansiosos por normalizar nuestra economía y cumplir con nuestros compromisos de manera sostenible al tiempo que protegemos nuestro tejido social y productivo", puntualizó.
Además, aprovechó el escenario para reivindicar la tesis argentina de mantener abiertas las fronteras comerciales en plena emergencia sin abandonar las prioridades sociales en el manejo de la crisis sanitaria. Neme resaltó el compromiso del país en preservar el flujo de provisión de alimentos global en el contexto de la pandemia para mitigar los efectos adversos de la crisis global, preservando un flujo de comercio tan adecuado "como lo permita la situación actual del transporte mundial".
Cuáles son los posibles escenarios para la deuda argentina si no hay acuerdo
"Este es un tiempo para la acción coordinada y la solidaridad global. Argentina continúa proveyendo al mundo con sus proteínas vegetales y animales de calidad, y, asimismo, nuestra industria agroalimentaria se está adaptando muy rápidamente a esta nueva realidad", remarcó el funcionario. Y añadió: "Nuestros productos alimenticios, cereales, carne, frutas y aceites, entre otros, se embarcan diariamente a muchos destinos en todo el mundo."
Ayer, la Cancillería presentó oficialmente el Programa de Generación y Análisis de Información Comercial, con el objetivo de elaborar estrategias e comercio exterior que permitan abrir vetas sectoriales o territoriales en medio de la pandemia. Enmarcado dentro de la Subsecretaría de Promoción del Comercio e Inversiones, lo que se busca es mantener un relevamiento actualizado, a partir del trabajo de las embajadas, sobre las diversas variables que determinan las oportunidades comerciales: condiciones de acceso (barreras fitosanitarias, certificaciones, estructura arancelaria) y demanda de productos y servicios a la par de mantener actualizados los datos sobre actores relevantes (como ser el registro de importadores).
"Argentina continúa proveyendo al mundo con sus proteínas vegetales y animales de calidad y nuestra industria agroalimentaria se está adaptando a esta nueva realidad"
Dese el área comercial de la Cancillería, hace semanas que se trabaja en detectar nichos comerciales en medio de un mundo que cierra sus fronteras por el avance del coronavirus. Se han encontrado oportunidades para un amplio abanico de alimentos (porotos, arroz, carne, aceites y pescados) en destinos como El Salvador, Italia, Alemania y Azerbaiyán.
"Las inversiones deben mantenerse y aumentarse después de la pandemia, a fin de contribuir mejor al desarrollo y a una recuperación económica mundial sostenible, equilibrada e inclusiva. En particular, estamos listos para recibir inversiones en agronegocios en Argentina, ya que tenemos excelentes condiciones naturales, capacidad técnica y competitividad para expandir nuestra frontera de producción", remarcó Neme.
"Las inversiones deben mantenerse y aumentarse después de la pandemia, a fin de contribuir a una recuperación económica mundial sostenible, equilibrada e inclusiva"
El documento final del encuentro de Finanzas y Comercio del G20 destaca la necesidad de encarar una respuesta global al Covid-19 de forma tal que se pueda "construir resiliencia y fortalecer el comercio y las inversiones a nivel global". A lo largo de su punteo, establece medidas para encarar este esquema de cooperación global con acciones a corto y largo plazo.
En primer término, exhorta a que cualquier medida comercial de emergencia adoptada para enfrentar la crisis sea "proporcional, transparente, temporal y que refleje nuestro interés en proteger a los más vulnerables". Por sobre todas las cosas, que no distorsione el normal funcionamiento de la cadena de suministros a nivel internacional con "barreras innecesarias". Y que se garantice el apoyo a las pequeñas y medianas empresas asi como la salvaguarda de los empleos. Hacia el futuro, los firmantes reivindican el rol de la Organización Mundial del Comercio y su "reforma necesaria" pese a que algunos de ellos, como Estados Unidos, le han restado poder de acción en los últimos años.