Afirman que la invasión de mosquitos no trae riesgos de dengue y otras enfermedades
Los molestos visitantes, según funcionarios porteños y bonaerenses, son Aedes Albifasciatus y no los más pequeños y peligrosos Aedes Aegypti. Qué dicen de la fumigación.
La temible combinación de lluvias, humedad y lapsos de calor agobiante posibilitó que en los últimos días haya verdaderas nubes de mosquitos en la Ciudad de Buenos Aires y el Conurbano, tanto desde el gobierno porteño como desde la administración de Axel Kicillof hubo voces que llevaron tranquilidad en el sentido de que "se trata de son Aedes Albifasciatus, que pican mucho pero no son Aedes Aegypti, por lo que no contagian dengue, fiebre amarilla y otras enfermedades”.
“No hay casos de Dengue en Buenos Aires y estos mosquitos no lo trasmiten”, tranquilizó Julián Antman, gerente del área de Planificación Sanitaria del Ministerio de Salud de la Ciudad, mientras desde la capital bonaerense la directora de Epidemiología de la provincia, Andrea Jait, remarcaba también como positivo que el AMBA esté bajo las alas de los Aedes Albifasciatus, que viven en promedio unos 7 días. "Igualmente seguimos de cerca el tema y ya descartamos unos 60 casos sospechosos de dengue", agregó.
Qué son los Aedes Albifasciatus
"Hay que saber diferencias a los mosquitos que se ven en estos días de los Aedes Aegypti", indicó Antman, señalando que los actuales visitantes estivales aparecen por el calor, mientras que el del dengue es más chico y con patas blancas y negras, con hábitos domiciliarios, no está en parques o plazas, sino que se mantiene en ámbitos como "casas o departamentos, en los que encuentra mayores posibilidades para encontrar lugares de cría".
"En la Ciudad los principales criaderos del mosquito del dengue son los floreros o bebederos de mascotas", precisó Antman, considerando "esto va a durar, porque hay agua y calor por todos lados". Enfatizó, sin embargo, que la invasión actual de los molestos visitantes "no representa un problema de salud pública".
No hay circulación del virus de dengue
Jait recalcó que “en estos momentos estamos en un período interepidémico sin circulación del virus y es probable que por la restricción de traslados por la pandemia de Covid-19 disminuya un poco la circulación de personas que quizás llegan contagiadas de otras regiones, pero de todos modos estamos muy atentos al dengue y alentamos a la población a que se tome el tiempo para erradicar los criaderos de mosquitos de sus casas”.
“Hay que desalentar los pedidos de fumigación, porque en la mayoría de los casos es totalmente ineficaz", agregó la funcionaria bonaerense, indicando que "salir a fumigar parques o plazas resulta contaminante e inútil, ya que el Aedes aegypti es domiciliario y no habita grandes espacios verdes".
La pandemia disminuyó la transmisión de dengue
“La fumigación por su escaso poder residual no es sustentable, si bien una proporción de mosquitos adultos muere con la aplicación de insecticidas, las larvas derivarán en pocos días en nuevas poblaciones; además los productos químicos utilizados pueden generar resistencia en los mosquitos y requerir dosis cada vez más altas de veneno para lograr el mismo resultado”, completó Jait.
Antman sostuvo que “después de un año epidémico como el que tuvimos en 2020 suele ocurrir que se registren pocos contagios, y además las limitaciones a los viajes internacionales que se impusieron por la pandemia de Covid-19 disminuye las probabilidades de que personas que normalmente viajaban a Bolivia, Paraguay o Brasil regresen contagiadas”.
TE/HB