Provincia de Buenos Aires impuso una sanción millonaria a Worldcoin por el manejo irregular en los escaneos de iris
Las autoridades bonaerenses multaron a la compañía fundada por Sam Altman, co-creador de ChatGPT. Apuntan a la falta de protección de los datos biométricos sensibles.
Orb, el dispositivo encargado de escanear el iris de las personas |
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La provincia de Buenos Aires impuso una sanción de $194 millones a Worldcoin Foundationpor la manejo irregular de los datos biométricos obtenidos mediante los escaneos de iris que se realizaron a lo largo de la región. La decisión fue tomada a través del Ministerio de Producción, Ciencia e Innovación Tecnológica, desde donde también se ordenó la eliminación de cláusulas abusivas en los contratos de la empresa y la protección de los derechos de los consumidores.
La investigación comenzó a principios de este año, cuando se descubrieron significativas irregularidades en las operaciones de Worldcoin, una compañía fundada en 2019 por Sam Altman, co-creador de ChatGPT. Esta empresa se hizo ampliamente reconocida por verificar la identidad a través del escaneo de iris, a cambio de una suma de criptomonedas, actualmente valuadas en los 80 dólares.
El programa no establece un límite de edad claro para participar y tan solo requiere la aceptación de algunos términos, entre los que figura la imposibilidad de demandar a Worldcoin. Esta cláusula alertó al Gobierno bonaerense, que puso el foco en la gestión y poca seguridad de los sensibles datos biométricos recogidos por la empresa mediante el dispositivo 'Orb'.
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Las autoridades provinciales descubrieron que los contratos de adhesión contenían cláusulas que infringían normativas locales y que los datos biométricos no se manejaban como se había prometido. Entre los hallazgos más preocupantes se halló laausencia de credenciales de identidad y la falta de información sobre la edad mínima necesaria para utilizar el servicio.
"La falta de estos requisitos podría exponer a menores de edad a la recolección de datos sensibles, lo que subraya la necesidad urgente de una regulación más estricta en un contexto de creciente vulnerabilidad entre los adolescentes", mencionó Ariel Aguilar, Subsecretario de Desarrollo Comercial y Promoción de Inversiones de la Provincia de Buenos Aires, a Página 12.
En relación con las cláusulas abusivas en los contratos de Worldcoin, se reveló que estos documentos contenían disposiciones que permitían la suspensión del servicio sin reembolsos, la renuncia a acciones legales colectivas y la aplicación de leyes extranjeras. Estas condiciones contravienen el Código Civil y Comercial de la Nación, vulnerando derechos fundamentales y presentando un desafío significativo contra la regulación local.
"Las contradicciones en el contrato y la falta de claridad sobre el almacenamiento de los datos biométricos generan serias dudas. La complejidad y novedad de esta tecnología requieren una supervisión rigurosa para proteger a los consumidores", agregó Aguilar.
La Fundación Worldcoin se comunicó con PERFIL y manifestó estar "sorprendida por la reciente multa impuesta por la Dirección Provincial de Protección al Consumidor", aclarando que la "rechaza".
"La Fundación Worldcoin considera que existe un malentendido fundamental sobre los hechos y el marco legal y apelará esta decisión, confiando en su posición y los precedentes establecidos por tribunales competentes", argumentaron a este medio.
Y concluyeron: "La Fundación Worldcoin mantiene su compromiso de mantener prácticas transparentes y justas, y continuará defendiendo los más altos estándares de protección a la privacidad de datos en cumplimiento pleno de todas las leyes y regulaciones aplicables en los mercados donde opera Worldcoin".
Durante los primeros meses de 2024, la convocatoria de Worldcoin arrasó en línea debido a la crisis económica, la inflación y el ajuste de los sectores medios y bajos. A tal nivel que desde entonces superó los 500 mil adherentes argentinos que accedieron a escanear su iris a cambio de bonos en criptomonedas. Este escenario cobró notoriedad luego de que se vieran enormes filas en varios stands de la empresa situados en el Área Metropolitana Buenos Aires (AMBA).
Ante la falta de legislación local específica para regular este tipo de actividad y después de revisar normativa internacional, la provincia de Buenos Aires está desarrollando una ley de protección de datos que busque salvaguardar los derechos de los ciudadanos frente a las nuevas tecnologías.
Por su parte, la Fundación Worldcoin señaló que “está sorprendida por la reciente multa impuesta" y comentó a Página 12 su intención de apelar la decisión, alegando que "hay un malentendido fundamental sobre los hechos y el marco legal".
¿Qué es Worldcoin?
Worldcoin, cofundada en 2023 por Sam Altman, es una criptomoneda que emplea un sistema de verificación de identidad basado en el escaneo del iris. Tras completar este proceso, los usuarios pueden acceder a los tokens otorgados por la aplicación en su billetera virtual, con un valor equivalente a los 80 dólares.
No obstante, la empresa enfrenta un estricto escrutinio por parte de reguladores en diversos países. En Kenia, España y Portugal, se ordenó suspender la recolección de datos biométricos mientras se llevan a cabo investigaciones. A pesar de eso, Worldcoin tuvo un notable impacto en Argentina, un país con altos índices de pobreza e inflación.
En medio de la preocupación mundial por el manejo de estos datos sensibles, la empresa de Altman aclaró que no se trata de una "transacción" de iris por dinero, sino que la intención final es dar los primeros pasos hacia la construcción de "la red financiera y de identificación más grande del mundo". Una suerte de pasaporte digital que funcionaría gracias al blockchain, permitiendo a los usuarios demostrar su identidad en línea sin compartir otros datos personales.
Sin embargo, varios expertos advirtieron sobre la sensibilidad de un dato biométrico como lo es el iris, que es único de cada ser humano y "ultrasensible". "Yo no creo que las personas no comprenden en absoluto las implicancias que tiene; simplemente lo hacen por necesidad. Y además todavía hay una cuestión muy optimista y una magia que se genera por el orbe, una curiosidad", advirtió Natalia Zuazo, especialista en políticas tecnológicas y directora de la firma de consultoría digital Salto Agencia.
Más allá de las otras cuestiones, el atractivo económico se convierte en el principal factor motivador para que los argentinos entreguen voluntariamente esta información."Lo hago porque no tengo un peso, no hay otra razón", dijo a la AFP Juan Sosa (64), un profesor de artes marciales, luego de pararse frente a una esfera plateada con cámara incorporada en uno de los 250 "orbes" (puestos) instalados en todo el país.
