En el pase de sus programas emitidos por Net TV y Radio Perfil (AM 1190), Marcelo Longobardi y Jorge Fontevecchia analizaron el impacto de las políticas de “ucranización” de Donald Trump y su aspiración de expandirse hacia el norte, al mismo tiempo que Rusia intenta hacerlo hacia Europa.
Jorge Fontevecchia: Me quedé pensando en el tema de Europa, que me parece es el gran tema alrededor de cómo se está rearmando el mundo. Ayer, el gral. Juan Martín Paleo, quien fue jefe del Estado Mayor Conjunto, me mandó un texto llamado “Ante la necesidad de un nuevo equilibrio geopolítico”. Él planteaba algo interesante para todos los argentinos que quieren tener pasaporte europeo, y dijo: "Quienes aspiren a disponer de una nacionalidad europea deberán prepararse para servir en sus fuerzas armadas de forma efectiva y arriesgarse a enfrentar una tercera guerra europea que los vuelva a empujar a abandonar Europa. Pero qué harán las minorías musulmanas, árabes, africanas, que son una parte importante de la población europea hoy. Me quedé pensando y lo pienso todos los días. Los últimos dos domingos escribí sobre Europa. Está cambiando el mundo después de 80 años. Estados Unidos, con la OTAN, era el protector de Europa.
También llama la atención algo muy interesante que yo no sabía. En un largo artículo que él escribió, menciona que dos veces Rusia quiso entrar a la OTAN. Cuando se fundó, en 1949 y Estados Unidos le dijo que no, y luego cuando cayó la ex Unión Soviética, cuando desapareció el muro de Berlín, entonces el Estado ruso, ya no la Unión Soviética, también propuso integrarse a la OTAN y le dijeron que no. No tengo un videíto hoy para mostrarte, divertido, pero se me ocurrió contarte esta historia. No sé si sabés, pero fui casi un lustro, secretario de Comercio de la Cámara Ruso-Argentina. Conozco Rusia muy bien, y Perfil tuvo una revista de modas en Brasil durante casi una década. Lo que me impresionó es la vocación europea de los rusos, es absoluta. Ellos no se consideran asiáticos.
Marcelo Longobardi: Vienen de los zares…
JF: Fíjate que Pedro I movió la capital de Moscú a San Petersburgo para que esté en el Atlántico, para que haya un punto de la capital que esté más cerca de Europa.
ML: Y para parecerse a París, además.
JF: Pero lo que más me impresionó de la aspiración rusa de ser europeo fue en Vladivostok. Una vez tomé el famoso Transiberiano que te lleva a la otra punta de Rusia, que está enfrente del mar de Japón. Los autos que se usan allí son todos autos japoneses, o sea que se maneja con el volante a la derecha, en lugar del volante a la izquierda, como en toda Rusia y como acá. ¿Por qué los autos allí están todos con el volante al revés? Porque en Japón, a los 2 años, los autos ya son viejos, entonces los autos viejos de Japón se venden a precios regalados, entonces los rusos compran los autos japoneses. Es como la distancia que hay entre Buenos Aires y Montevideo, y se llama Mar de Japón. Si le preguntás a los rusos que están allí si se sienten europeos o asiáticos, y te dicen: "Nosotros somos europeos". Además, son todos de fisionomía caucásica, son blanquitos, rubiecitos. Entonces, hay un tema allí, porque desde la perspectiva de Trump, América es toda para él, y Europa es toda para Rusia. Hay una cuestión de fondo bien compleja que tienen los europeos allí, que siempre tuvieron aversión a los rusos, y los dos choques que tuvieron: con Hitler por un lado, y con Napoleón por el otro. En la avenida principal, lo que sería el monumento de los españoles nuestros en Moscú, está el Arco de Triunfo, que te marca hasta acá llegaron las tropas de Hitler y hasta acá llegaron las tropas de Napoleón, y nosotros lo vencimos, lo que le dijo Putin a Macron. Rusia es un país apasionante.

ML: Recordemos que Napoleón colapsó allí producto de su improvisación en 1812, con el ejército más grande de la historia. Eran 600.000 tipos, y creo que sobrevivieron 100.000, víctimas del frío y de las enfermedades, producto de un disparate napoleónico que fue invadir Rusia.
JF: El famoso general invierno, como ellos decían. El invierno los iba matando. Salieron 600.000 y murieron 500.000. Ahora, en Ucrania ya llevan 500.000 muertos. En Ucrania, cuando fueron todos los norteamericanos y europeos a decirle a los ucranianos que sean héroes, luchen, sean valientes, y ahora les tiran alfombra. Ucrania puso 500.000 vidas en esta guerra.
ML: Tanto es así lo que planteas respecto de Rusia y Estados Unidos, de cómo se están, como pretende repartirse el mundo, que hay una palabra nueva que me parece la palabra del momento a nivel internacional, que es la palabra “ucranización”. Es una palabra que presentó un dirigente canadiense, diciendo que Trump quiere ucraniarizar -un verbo inexistente- a Canadá y a Groenlandia. Fíjate la agresión de Estados Unidos a Groenlandia que está ocurriendo ahora. Es una cosa que en América era impensable que un gobierno norteamericano se vuelva abiertamente expansionista y que aspire a quedarse con territorios que pertenecen a terceros por la fuerza o por este papel de JD Vance, que dice ir ahora a Groenlandia a verificar el estado de seguridad del lugar, es una cosa hasta ridícula. ¿Qué es lo que va a verificar, con un largo vista, a ver qué hay alrededor? Hay 50.000 o 60.000 habitantes que no quieren ser americanos, porque como vos sabés muy bien, la política es muy dinámica.
Entonces, esta aspiración de Trump de expandirse hacia el norte, a Canadá y a Groenlandia, y la de Rusia de expandirse hacia el oeste, hacia Europa, ha generado reacciones muy interesantes. En el caso de Canadá, esta cuestión de Trump va a consagrar un primer ministro, el señor Mark Carney, que va a ganar la elección en abril argumentando que él se contrapone con Trump. En el caso europeo, se está armando un eje, que quizás sea una palabra inapropiada, o una fuerza revitalizada entre Francia, Alemania y el Reino Unido, con un tipo muy interesante que hay que seguirlo de cerca, que se llama Starmer. Pasa desapercibido porque es una persona aparentemente medio gris y no tiene los pelos parados como Boris Johnson, ni como Trump, ni como Milei, pero es un tipo muy interesante, que es Keir Starmer, el Primer Ministro británico. Entonces, estas iniciativas disparatadas de Trump y de Putin tienen una reacción que es muy interesante de seguir. Comenté esta mañana que comenzó a repartirse en Europa, y muy especialmente en Francia, un manual de supervivencia. Lo publicó El País de Madrid. No dicen guerra, porque no quieren espantar a la gente ante cualquier eventualidad que ocurra, pero dicen que ante un incidente medioambiental, una catástrofe, lo que sea, más vale tener en casa pastillas de yodo, que son para contraponerse a una contaminación nuclear.
JF: Aquel axioma número uno de sociología dice que “entre la agresión externa, los grupos se cohesionan". Entonces, lo que está logrando Trump por un lado es que Inglaterra salga del Brexit, aunque sea de manera simbólica, vuelva a Europa y Europa se junte. Europa tiene 450 millones de habitantes, y si estuvieran dispuestos a invertir todos el 3% del Producto Bruto en armamento, le ganarían a Estados Unidos. Simplemente han gozado de esa ventaja, comprensible también, porque en realidad sería ideal que no existiera esa necesidad de armarse hasta los dientes, pero la amenaza rusa los obliga. Lo interesante es que a Trump le sale todo mal, porque quien va a ganar en Canadá estaba a la mitad de intención de votos del candidato que era trumpista hace seis meses. Es decir, Trump hace ganar en Canadá al opositor de quien era simpatizante de Trump y hace unir Europa.
Luego, está el tema de Marco Rubio, que es un hispano, cubano, hijo de cubanos exiliados, secretario de Estado de los Estados Unidos, el puesto más importante. Claramente, para Estados Unidos, lo que en nuestro país sería el ministro de Economía, allí es el secretario de Estado. Yo creo que tiene que ver con su teoría de “América para los americanos”, él está mirando, en su espacialismo, no solo a Groenlandia y Canadá, sino a toda Sudamérica. ¿Y qué habla toda Sudamérica? Español. Creo que Marco Rubio está colocado allí por el objetivo de Trump, ese objetivo expansionista en América. Que un cubano, con el nivel de resentimiento de los padres exiliados, sea el ministro de Relaciones Exteriores de Estados Unidos, hay que poner las barbas en remojo, fundamentalmente en toda Centroamérica. Ahora, a Trump le está saliendo todo mal, y esto es un dato para Milei, porque es muy probable que todas las expectativas respecto de lo bueno que podría traerle Trump a Estados Unidos se vayan diluyendo progresivamente y aparezcan las consecuencias negativas de su medicina, como cualquier error de Trump o pérdida de prestigio mundial de Trump.¿Será cierto que Macron, que es ahora un adversario de Trump, le dice a Milei que lo apoya en el Fondo Monetario Internacional? Los problemas de Trump van a ser problemas para Milei.

MF: Claro. Fijate que hay tres países, -Gran Bretaña, Alemania y el Reino Unido-, que son hoy en día aliados en Europa en contra de Putin, en contra de Orbán, que es un amigo de Milei, y en contra de Trump, de los que Argentina finalmente depende para el voto en el Fondo Monetario. Yo no sé qué tenía que festejar ayer Macron con Milei. Recordá que en el discurso del 23 de enero en Davos, que obviamente quedó reducido a esta postura de Milei respecto a la relación de la homosexualidad con la pedofilia, pero en ese debate, el tipo se presentó en Europa, en Suiza, como un aliado de Orbán. Hoy Orbán está siendo visto en Europa como un obstáculo, como un problemón. Además, como todos saben, es un autócrata, aliado de Putin. Me hubiera gustado ser una mosca para escuchar la conversación entre Macron y Milei.
Hay un artículo muy interesante que se llama “El momento De Gaulle”, que lo publicó en Clarín Carlos Pérez Llana. Lo que repasa en ese artículo es el papel fundamental, a partir de las ideas de De Gaulle, que era un tipo muy nacionalista, del presidente Macron para plantarse frente a Rusia, diciendo “cuidado que nosotros tenemos armas nucleares que fueron pensadas para circunstancias como estas”. También ocurrió que, en su momento, Donald Trump fue a festejar el Brexit con Steve Bannon, uno de sus promotores en la época de Boris Johnson. Creo que es Jaime Bailey que dice que Johnson es el idiota más culto del mundo, pero evidentemente metió al Reino Unido en un gran despelote. Trump, cuando el Brexit, va a festejar el Brexit a un lugar muy inapropiado, que es Escocia. Trump aterriza en un club de golf que él tiene allí, que se llama Turnberry, que es un lugar histórico porque fue la residencia del último gran rey escocés, Robert de Bruce, como en 1300, y fue un lugar muy importante para la Fuerza Aérea Británica, para la RAF, porque ahí estaban los valientes pilotos escoceses que peleaban contra los nazis. Ahí fue Donald Trump a conmemorar el Brexit, algo que generó un gran repudio de parte de los escoceses que estaban en contra del Brexit. Son todas locuras disparatadas de este hombre que está poniendo al mundo en peligro.
JF: Si hoy se votara en Inglaterra el Brexit, obviamente la votación sería diferente. Es uno de los más grandes errores de la política inglesa. Esto me mandaba Graciela Perú, una colega: “La manía, enfermedad psiquiátrica grave, de larguísima historia, es un clásico que normalmente es consecuencia de estos dos factores: una excelente opinión sobre sí mismo y no saber evaluar los riesgos propios”. Esto, a mi juicio, le cabe claramente a Trump, y yo le diría al gobierno de Milei que presten atención y tengan cuidado con los errores que va a ir cometiendo Trump, que los van a afectar, que van a afectar a la Argentina.
Hasta ahora, toda esta convulsión de los mercados, que vos le pones tanto foco y me parece que sí, que es otro de los temas cruciales, en gran medida también tiene que ver con lo que está pasando en el mundo y todo este desorden económico que produce Trump todos los días, las posibilidades de que pueda haber nuevamente inflación, las posibilidades de que pueda haber recesión en Estados Unidos. En Estados Unidos tenés que retrotraerte décadas para encontrar algo similar. Así como Milei se alegra y considera que Trump es su principal aliado y se aferra a él, lo mismo que pasa con Elon Musk. Con los desastres que está causando Elon Musk en Estados Unidos con su proceso de reducción del Estado, no sé cuánto va a durar en Estados Unidos. Entonces, todas estas asociaciones, que para Milei son un capital político actual, pueden ser un salvavidas de plomo de aquí a unos meses.
ML: Claro. Entonces, por último, entre estas derivaciones que estamos mirando y esta dinámica tan interesante de una reacción canadiense contra Estados Unidos en favor de acercarse a Europa, de una reacción británica de acercarse a Europa, de un una nueva vinculación entre Francia y Alemania, hay un fenómeno también nuevo muy interesante para el futuro. De la misma manera en que Argentina se volvió en un momento un país poco confiable para el resto de la comunidad internacional, como consecuencia de lo ambiguo que fue el peronismo en los años 40 con la Segunda Guerra Mundial y Argentina pagó durante años las consecuencias de haber estado más cerca de los nazis que de los aliados, me da la impresión que Estados Unidos puede comenzar a volverse un país poco confiable para sus aliados. Trump está metiendo a Estados Unidos en un gran problema. ¿Quién va a confiar de aquí en adelante en una alianza con Estados Unidos, en materia comercial, en materia de asistencia militar, en materia de defensa de las democracias? Es una cosa impensable que Estados Unidos, el país de la democracia más relevante del mundo y más poderosa, se convierta en un país en el que no se puede confiar.
Fíjate que no se puede confiar ni siquiera en un anuncio arancelario de Trump, que un día lo pone, al otro día lo saca. Vos viste el chat que trascendió entre los tipos de Defensa.
Santiago Caputo se reunió con uno de los estrategas de Donald Trump
JF: La gente que viaja a Estados Unidos tiene temor. Yo viví en Estados Unidos en la época de Reagan, y te voy a tener un videíto maravilloso de lo que Reagan opinaba sobre la inmigración y cómo está Trump destruyendo los Estados Unidos. Cuando llegás a Estados Unidos en el control de inmigración, todavía no estás en Estados Unidos, estás como en Guantánamo. Cuando pisaste el aeropuerto, todavía no cruzaste, no estás dentro de Estados Unidos. Te pueden sacar el celular, pueden no respetar tus derechos individuales de ningún tipo, entonces crea también hasta miedo en personas con green card, personas con pasaporte europeo. El otro día deportaron a un profesor francés luego de cuatro horas de interrogatorio porque en su celular, que le habían sacado habían encontrado críticas a la administración de Trump. Hay una situación de temor para viajeros, que yo creo que va a afectar al turismo también en Estados Unidos.
ML: Ya lo está afectando.
JF: Trump va a ser un problema serio para los Estados Unidos. Mañana te muestro ese videíto y hablamos de cómo aquella derecha conservadora, pero razonable, más parecida a lo que era el PRO en Argentina, se convirtió en esta cosa extrema, más parecida a La Libertad Avanza.
TV/ff