Diez personas fueron detenidas por la policía santafesina mientras cargaban un camión con toneladas de soja, presuntamente robada de un tren, en un galpón de Villa Gobernador Gálvez. Sin embargo, tras ser llevadas ante la Justicia, el fiscal decidió liberarlas, aunque la causa por encubrimiento continúa su curso.
La secuencia comenzó el sábado 26 de octubre, cuando un tren de Ferroexpreso Pampeano S.A. que llevaba alrededor de 1000 toneladas de soja hacia los puertos del Gran Rosario, el principal centro oleaginoso del país, fue asaltado por un grupo de delincuentes en un sector donde el tren circulaba a baja velocidad, en la villa La Tablita.
Aprovechando esta situación, los asaltantes cortaron las mangueras del sistema hidráulico de frenos del tren, lo que detuvo el convoy y permitió que, al menos, 26 vagones de los 68 fueran saqueados. Los ladrones abrieron las boquillas de los vagones y desparramaron el grano por toda la orilla de las vías.
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Equipados con baldes y bolsas, los delincuentes recogieron el cereal y lo cargaron en camionetas sin identificación. “La imagen era caótica, como si se tratara de una playa de arena”, describieron testigos. Los delincuentes utilizaron baldes para acarrear la carga y, posteriormente, camionetas sin patente se acercaron al lugar para recoger lo que podían”, relataron vecinos de la zona.
Días después, la Policía de Investigaciones (PDI) de Santa Fe encontró a diez personas cargando soja en un camión Mercedes Benz 1114 y en un automóvil Peugeot 504, en un galpón de Villa Gobernador Gálvez. “Los hallamos in fraganti y enviamos las actuaciones a la Justicia”, dijo una fuente vinculada con la investigación. Entre los involucrados, varios vecinos de la zona de Marcos Paz y Netri fueron vistos acopiando el cereal en bolsas de arpillera.
El fiscal Adrián Mac Cormack, del Ministerio Público de la Acusación, les abrió una causa por encubrimiento con ánimo de lucro, dado que estaban en posesión de la soja robada, propiedad de las empresas Cofco y Agricultores Federados Argentinos (AFA). No obstante, pese a la gravedad de los hechos, los acusados fueron liberados.
El modus operandi de los delincuentes
Por su parte, Luis Carello, apoderado de la compañía, detalló que “los trenes tienen un sistema de frenos neumáticos. Si perforas el tubo de aire, se escapa el aire y el tren se detiene automáticamente”.
“Quedó esparcido, lo que permitió que decenas de personas, equipadas con bolsas, comenzaran a recogerlo”, indicó un vocero de Ferroexpreso Pampeano, quien llamó a las autoridades a identificar y detener a los compradores del grano robado, porque “es inconcebible que no se haya detectado quiénes son los responsables de reducir los granos, ya que sin ellos estos delitos no se llevarían a cabo”, señaló. La mercadería tiene un valor estimado en unos 350.000 dólares
Según indican representantes de la empresa de transporte, el comportamiento de los delincuentes es habitual en esos tramos de la vía. Este "modus operandi", que quedó registrado en videos grabados por los propios operarios, también se lleva a cabo en otras zonas de la provincia.
También debe señalarse que más allá de las denuncias, con las evidencias fílmicas y/o fotográficas, pocas veces concluyen con la detención de los sospechosos.
